Conservar masade pizza es una idea bastante inteligente, ya que tendrás la base para hacer una preparación que encanta a muchos, en vista a que, si le preguntas a la gente en la calle por un ejemplo de comida italiana, lo más seguro es que respondan pizza.
Ahora bien, si vamos a conservar masa de pizza casera o comprada comercialmente, tendremos que regirnos básicamente por el mismo concepto, el cual la congelación, pero no es simplemente llegar y ponerlas en el freezer, hay que hacer un leve sellado, pero no nos adelantemos…
¿Cuándo conservar masa de pizza?
El mejor momento para conservar la masa de pizza casera es cuando esta masa ya ha reposado un poco, y por ende ha habido un poco de fermentación (levantamiento) de la levadura. Es decir, justo ese momento que dices «la masa esta lista, ahora voy a hacer la pizza», justo ahí
¿Cómo conservar masa de pizza?
Para empezar con este tema, tenemos que dejar en claro ciertas premisas, para que estés lo más informado posible respecto a conservar masa de pizza.
Por ejemplo, si se te ocurre dejar tu masa a temperatura ambiente en el mostrador o la despensa, solo lograrás que la levadura continúe expandiéndose, haciendo que la masa fermente en exceso, dándole un mal sabor.
Entonces la premisa es: cuando se deja la masa a temperatura ambiente, la levadura crecerá por un tiempo y luego morirá. Así que, si horneas la masa de pizza con levadura inactiva, no se levantará debido a que ya se ha utilizado todo el poder de la levadura. En su lugar, la masa sería sólo una corteza dura, masticable, sólida y poco apetitosa.
De lo anterior, sabemos entonces que tenemos que evitar que se produzca este efecto de fermentación, pero ¿cómo lo hacemos? La respuesta es simple: para conservar masa de pizza hay que bajar la temperatura refrigerando o congelando.
Como conservar masa de pizza en la nevera
Después de haber dejado que su masa haya fermentado hasta el punto en que casi la fueras a usar para tu pizza, en este punto, corta la masa en bolas que contengan la masa suficiente para hacer una pizza, con el fin de que podamos ahorrar espacio.
Luego, busca un contendor en el que puedas guardar tus masas de forma hermética y ponlas en el refrigerador. Lo mas recomendable y como son las bolas de plásticos sellables, ya que también permiten remover el aire de mejor forma.
Una vez envuelta, la masa puede ir directamente a la nevera. Con este puedes guardar la masa de pizza de un día para otro o más, ya que la masa de pizza se mantendrá durante aproximadamente 2 semanas en la nevera.
Para el momento en que decidas que necesitas de esta masa para hacer una rica pizza, solo debes desenvolverla del contendor en el que esta, y ya. Para este punto mi consejo es que te ayudes de un poco de harina o sémola sobre el lugar donde pondrás la masa para darle mejor forma y a la vez secarla un poco
Otra cosa importante, es necesario que antes de comenzar a cocinar, dejes reposar un poco la masa a temperatura ambiente, para que esta recupere de forma natural su temperatura ideal. Recomiendo unos 30 minutos de reposo previo.
Conservar masa de pizza en el congelador
¿Como congelar la masa de pizza? La respuesta es muy fácil, debes seguir los mismos pasos que anteriormente.
Debes cortar la masa en la cantidad necesaria para hacer 1 pizza y luego tendrás que envolver la masa firmemente en un recipiente hermético para evitar que se seque.
A continuación, coloca la masa en el congelador hasta que esté listo para usarla. Podrás conservar masa de pizza con este método por lo menos unos 3 meses.
Como descongelar la masa de pizza
La mejor manera de descongelar la masa de pizza es usando la nevera como punto intermedio.
El día antes de que ocupes tus pizzas debes ponerlas en alguna bandeja y añadirle un poco de sémola o harina, luego séllala con papel plástico para que no entre aire y déjala en el refrigerador durante unas 16 horas.
Al conservar la masa de pizza en la nevera por toda la noche, tal como lo mencionamos anteriormente, debes dejar reposar la masa a temperatura ambiente por al menos 30 min para poder preparar tu pizza.
Señales de que la masa de pizza está mala
Es más difícil determinar cuándo se echa a perder la masa de pizza casera. La masa cruda puede contener bacterias que causan enfermedades, explica la Federación de Alimentos y Medicamentos (FDA). La harina, independientemente de la marca, puede estar contaminada. La FDA ha documentado casos de intoxicación alimentaria por el consumo de harina cruda.
Si por el contrario, es una masa de pizza comprada, debes revisar que no este pasada en la fecha de vencimiento, ya que es una obligatoriedad rotular esta fecha.
El moho o un olor fuera de lugar son señales obvias de que la masa de pizza en la nevera ya no se encuentra en buen estado. Como muchos alimentos, se puede decir que están malos cuando lo encuentras sin sabor, pero no vale la pena hornear una masa que ya tienes idea de que esta mala
Si sacas la masa de la nevera y su textura disminuye o es una sensación excepcionalmente seca, con un aspecto crujiente, es probable que haya pasado su mejor momento. Ponlo en la papelera.
Si la masa de pizza tiene un color gris, en lugar de uno blanco o beige fresco, o masa que tiene manchas de gris, significa que esta lista para la basura. Al conservar masa de pizza de forma inadecuada, es posible que aparezcan signos de quemadura de hielo, como manchas blanquecinas o cristales de congelador visibles, lo que tampoco es bueno, no tanto por salud, sino por el resultado en sabor y calidad.
Nadie puede poner en duda su capacidad nutritiva y gastronómica, pero el problema es que son por temporada, y la pregunta surge de inmediato ¿Cómo puedo conservar habas?
Es posible conservar habas durante 3 a 4 días en la nevera una vez que se han desvainado, pero en sus vainas pueden durar 10 días. Luego las puedes congelar de 10 a 12 meses, o puedes deshidratarlas también por un año o incluso más. Por su parte, las habas cocidas pueden durar 4 a 5 días en la nevera, o 6 meses congeladas.
A lo largo de esta guía, discutiremos los procesos adecuados para almacenar sus habas. No importa si los cultivaste tu o las compraste, tenemos la solución para conservar habas más abajo, así que sigue leyendo.
Cómo conservar habas desenvainadas crudas
Cuando tienes a disposición tus habas fuera de sus respectivas vainas, tienes varias opciones para poder almacenarlas, pero te vamos a mencionar las más importantes que en la nevera, congeladas o deshidratadas.
Conservar habas desenvainadas en la nevera
Este es el método más simple y el que tiene una menor duración, pero que a su vez las mantiene mas frescas. Para realizar este método debes hacer lo siguiente:
Paso 1: No lavar las habas.
Mas que un paso es una recomendación, y es que cuando se lavan las habas y se guardan en el refrigerador, la humedad hace que se pongan en mal estado de forma más rápida, por lo que solo debes lavarlas al momento de consumirlas, pero si debes limpiarlas con paños para eliminar la suciedad.
Paso 2: Transfiere las habas a un recipiente hermético.
El recipiente hermético tiene como finalidad proteger a las habas de agentes externos como la humedad y el oxígeno.
Paso 3: Almacena las habas en la nevera.
Finalmente debes poner las habas en el refrigerador. Te recomiendo que las pongas en la parte mas fría de la nevera, que suele ser la parte de abajo. De esta forma, las habas crudas desenvainadas pueden durar 3 a 4 días.
Congelar habas crudas (frescas)
Existe mucha gente que me ha preguntado si se puede congelar las habas, y la verdad es que es un método bastante bueno que te ayudará a resolver el problema de estacionalidad que tienen las habas, ya que es un fruto ligado mayormente a la primavera.
Para congelar las habas frescas debes hacer lo siguiente:
Paso 1: Lava las habas.
A diferencia del método anterior, aquí si debemos lavar las habas para eliminar cualquier impureza que pueda tener el producto.
Paso 2: Llena una olla con agua y hierve
Para el siguiente paso se requiere que hiervas agua, ya que vamos a blanquear las habas. Por lo tanto, una vez que hierva el agua, comienza el paso 3.
Paso 3: Blanquea las habas.
El proceso de blanqueo se realiza para detener ciertas enzimas que se pueden desarrollar durante el periodo de almacenamiento y que pueden tener consecuencias nocivas para el organismo.
Para ello, vamos a poner las habas en el agua hirviendo y las vamos a dejar ahí por 2 a 3 minutos de forma tal que hierven, pero no se cocinan.
Paso 4: Retira las habas en agua con hielo.
Es necesario para el proceso de cocción de las habas que estaban en agua hirviendo. Si solo las retiras y las pones en alguna fuente, debido a las altas temperaturas a las que fueron expuestas las habas, estas no pararán su cocción. Por lo tanto, debes retirarlas y ponerlas en agua helada (si tiene hielo, aun mejor).
Paso 5: Escurre las habas.
Retira las habas del agua helada y escúrrelas con un colador o cualquier utensilio que te sirva para que vayan perdiendo agua. la mayor cantidad de agua que puedas.
Paso 6: Remueve el exceso de agua
Con escurrir el agua no es suficiente, ya que se necesita eliminar la mayor cantidad de agua para que una vez que se congelen las aguas no se formen cristales de hielo que perjudiquen su calidad. Puedes usar toallas de papel o paños de cocina para ello.
Paso 7: Congelamiento rápido.
Pon las habas en una bandeja con papel encerado o lámina antiadherente de tal forma que quede espacio entre las habas y vamos a congelar por 2 o 3 horas. La idea de este paso es que, al quedar algunos residuos de agua, luego las habas se pueden quedar pegadas unas con otras al momento de congelarse.
Paso 8: Transfiere a un recipiente hermético.
Generalmente se usan bolsas plásticas estilo ziplock ya que son cómodas y permiten que se les pueda sacar algo de aire dentro. No obstante usar algún otro recipiente hermético apto para congelamiento es válido.
Paso 9: Etiqueta con la fecha de almacenamiento.
Es importante seguir las buenas practicas se almacenamiento, por lo que debes colocarle un sticker o escribir en el mismo recipiente la fecha de conservación para que tengas un control sobre la vida útil del producto.
Paso 10: Coloca las habas en el congelador.
Finalmente, ya estás en condiciones de poder congelar las habas por un periodo de al menos 12 meses.
Cómo deshidratar las habas
Otra alternativa que tienes para conservar las habas consiste en deshidratarlas o secarlas. Ten en cuenta que es un método que cambia la textura de las habas. Para ello, deberás hacer lo que te indico a continuación:
Paso 1: Lavar las habas.
Añade agua en un tazón con las habas hasta sobrepasar por un dedo las habas y remueve bien para desprender la suciedad. Cuela y repite el lavado una vez más.
Paso 2: Secar las habas.
Tras colar las habas, usa una toalla limpia y remueve el exceso de agua, ya que la deshidratación es un proceso que remueve el agua.
Paso 4: Deshidratar las habas.
Si tienes planeado usar un horno convencional para secarlos, coloca en una bandeja papel pergamino y esparce las habas sin que queden juntas unas con otras.
Lleva al horno a la temperatura más baja que permite (por lo general, unos 90°C), y deja secar durante 6 u 8 horas. Pero debes estar muy pendiente después de que pasen 4 horas, porque se podrían quemar.
Ahora si tienes un deshidratador de alimentos, esparce las habas sobre las bandejas, ajusta la temperatura a 60°C y deshidrata durante 8 y 10 horas. Cambia de posición las bandejas cada 3 horas para que se sequen equitativamente.
Sabrás que las habas están secas, cuando se pongan duros y arrugados. Si sientes que están un poco flexibles o aguados, todavía les falta deshidratarse.
Paso 5: Transfiere a un recipiente hermético.
Espera a que las habas se enfríen para pasarlos a un recipiente hermético (preferentemente de vidrio). Pero si los quieres guardar en el freezer, usa bolsas herméticas que sean para congelar.
Paso 6: Escribir la fecha de almacenamiento.
Recuerda siempre tener un control sobre el almacenamiento, y en mayor medida cuando se trata a largo plazo.
Paso 7: Guardar las habas.
Llegado este punto estas listo para almacenar las habas secas, no obstante, este producto puede ser conservado de diferentes formas, como veremos a continuación.
Donde almacenar las habas secas o deshidratadas
Las habas deshidratadas se pueden almacenar en dos lugares distintos que son:
A temperatura ambiente: Debe ser un lugar oscuro, fresco y seco como la despensa donde duran entre 9 a 12 meses.
Congelador: No importa si es un congelador como tal, o el famoso freezer de la nevera. Las habas deshidratadas pueden durar de 18 a 24 meses en el congelador.
Como conservar habas en vainas
Cuando tienes las habas en sus vainas, lo mejor es mantenerlas frescas en la nevera, donde tendrán una duración mayor a la que presentan en su formato en grano. Para ellos debes:
Paso 1: No lavar las vainas.
Puedes remover la suciedad usando cepillos o paños, pero no les pongas agua.
Paso 2: Envolver en papel de cocina.
Es necesario envolver las habas en toallas de papel de manera que puedan protegerse de agentes externos pero que no queden totalmente aisladas, es decir, que pueda circular el aire a través de los poros de la toalla.
Paso 3: Poner en una bolsa
Siguiendo la idea del paso anterior, la idea es añadir una nueva capa de protección pero que no corte del todo la circulación del aire. Para ello, utilizarás una bolsa plástica comun, pero no la vas a cerrar, así permitirás que el aire circule libremente.
Paso 4: Guardar en la nevera
Finalmente puedes almacenar las habas en vainas en la nevera. Bajo este método, las habas pueden llegar a durar 10 días.
Este es el único método seguro de conservar las habas en vainas, por lo que si deseas congelarlas, necesitas removerlas de sus vainas y aplicar los pasos para congelar las habas explicado en la sección anterior.
Conservar habas cocidas
Otra forma comun en la que puedes encontrar las habas es que este cocidas, y para conservarlas tienes nuevamente dos opciones que son: el refrigerador o el congelador.
En cualquier caso, debes realizar los mismos pasos que como si estuvieran frescas o crudas, con la excepción que es decir que debes esperar a que se enfríen, pero evitando que pasen más de 3 horas a temperatura ambiente.
Es decir, para conservar habas cocidas en la nevera debes:
Esperar a que se enfríen las habas
Escurrirlas en caso de que estén cocidas en agua.
Seca las habas con papel absorbente.
Ponlas en un recipiente hermético.
Guárdalas en la nevera.
Y para congelar las habas cocidas debes:
Esperar a que se enfríen las habas
Escurrirlas en caso de que estén cocidas en agua.
Seca las habas con papel absorbente.
Utiliza bolsas herméticas aptas para congelar.
Separa las habas en raciones de consumo para no descongelar todo.
Etiqueta con la fecha de almacenamiento.
Guárdalas en el congelador.
Las habas cocidas en la nevera duran entre 4 a 5 días y congeladas duran 6 meses.
¿Cuánto duran las habas?
Producto
Duración
Habas crudas sin vaina en el refrigerador
3 – 4 días
Habas crudas congeladas
10-12 meses
Habas en vaina en el refrigerador
10 días
Habas cocidas en la nevera
4 – 5 días
Habas cocidas congeladas
6 meses
Habas deshidratadas a temperatura ambiente
9 – 12 meses
Habas deshidratadas en el congelador
18 – 24 meses
¿Cómo saber si las habas se echaron a perder?
Verás que las habas se dañaron cuando tengan manchas o pelusas blancas o negras, es decir, cuando desarrollen moho. Si las habas se encuentran viscosas o su textura es demasiado blanda, significa que están malas. El olor es otro factor para reconocer habas en mal estado. Si desprenden un hedor ácido o rancio, arrójalas a la basura porque ya se dañaron.
¿Cuál es la mejor forma de conservar las habas?
La mejor forma de almacenar las habas es congelándolas, ya que se mantienen por una temporada completa y su contenido nutricional se mantiene casi intacto. [1] Ahora bien, si te gustan las habas lo más frescas posibles, utiliza la nevera. Es una forma sencilla de conservar las habas a sabiendas de que las debes consumir prontamente. Si aún están en sus vainas, te van a durar más en la nevera que en su formato desgranado. Si no deseas utilizar una nevera o congelador, puedes deshidratarlas y conservarlas a temperatura ambiente por 1 año.
¿Se pueden congelar las habas crudas?
La realidad es que se pueden congelar las habas crudas de forma directa, pero los resultados serán malos y de hecho no se recomiendan congelar por más de dos meses de esa forma. Por lo tanto, blanquéalas y tendrás mejores resultados.
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Las guindillas le dan una chispa a nuestras comidas que no se consigue en cualquier lado, y por lo mismo, aquí te enseñaremos a conservar guindillas como si estuvieran recién cosechadas, para que la calidad de tus comidas siga a nivel gourmet.
También es importante informar que a la guindilla se le conoce en otros países como chile o simplemente ají, todas estas formas son aceptadas para denominar a nuestro querido pimiento picante.
Pero no demoremos más, vamos a empezar esta guía para conservar guindillas.
Como conservar guindillas
Queremos chile todo el año. Esa es la frase que escuchamos por mucho tiempo pero que no habíamos respondido, hasta ahora.
Te dejamos a continuación no una, sino 4 formas en la que puedes conservar
Secado de guindillas
El secado de guindillas elimina toda la humedad, lo que le permite rehidratarlos más tarde o molerlos en polvos. Me parece que el tema de moler mola más, se me hace como tener un rico paprika, de hecho, hacer mezclas con otros polvos es bastante común dentro de la gastronomía. Aunque poner el ají entero en una sopa, uff mamma mía.
Para conservar guindillas secándolas, simplemente coloque las guindillas enteras en una bandeja para hornear y caliente en el horno a la temperatura más baja hasta que se seque.
Cuando notes que están arrugadas y con tono de color más oscuro, sabes que están listos.
Retirar del horno y dejar a temperatura ambiente para enfriar, luego hay que guardarlos en un recipiente hermético.
Haciendo polvos con las guindillas, pueden almacenarlas por años, pero perderán potencia con el tiempo. Ahora si los tienes enteros en un recipiente hermético al vacío o con la menor cantidad de aire, puedes conservar guindillas por al menos 6 meses. No recomiendo más porque se pierde mucha calidad de producto
Como congelar guindillas
La congelación es uno de los métodos más simples para conservar guindillas. Solo debes asegurarte de tener espacio en el congelador o freezer para poder almacenar las guindillas por al menos 6 meses.
Este es el paso a paso de como congelar guindillas
Asegúrate que tus guindillas no muestren signos de pudrición.
Lava las guindillas y luego sécalos completamente.
Cortar los ajíes y quítales los tallos. Retira las semillas y la membrana, si lo deseas.
Puedes picarlos o tenerlos enteros, es a preferencia de cada uno.
Guarda las guindillas en un contenedor que selle al vacío o donde puedas remover la mayor cantidad de aires. Las típicas bolsas de plástico funcionan bien.
Pon los pimientos en el congelador.
Algunas personas prefieren blanquear antes de conservar guindillas, pero no es necesario. Sin embargo, si desea blanquear los pimientos, simplemente coloque los pimientos en rodajas en agua hirviendo durante 2 minutos. Escurrir, enfriar y secar, luego congelar según sea necesario.
NOTA: Al cortar las guindillas, te recomendamos uses guantes, ya que a veces el aceite que sale de la guindilla que produce la sensación de picante puede causar ardor en la piel.
Como descongelar guindillas
Para descongelar el chile congelado, simplemente retira la cantidad que necesita del congelador y ponlos a temperatura ambiente. No hay más ciencia.
Si te excediste en tus cálculos y quieres volver a congelar, puedes hacerlo. Según la información de este sitio del gobierno de USA, es posible volver a congelar guindillas si aún conservan cristales de hielo, o si se encuentran con una temperatura inferior a los 4°C, aunque igualmente esto puede tener un efecto negativo en la calidad del chile.
Chiles encurtidos
Encurtir tus pimientos los mantendrá por un buen rato. Es un método popular, fácil de hacer, y le permite disfrutar de pimientos encurtidos en muchos platos.
Básicamente implica preservar los pimientos en una salmuera de vinagre y condimentos adicionales, por lo que si disfrutas de pimientos encurtidos en restaurantes, ahora puedes disfrutarlos en casa.
El paso a paso para conservar guindillas con este método empieza así.
Lavar y secar los chiles. Corta los grandes en trozos pequeños.
Los pimientos pequeños se pueden dejar enteros, pero sería bueno hacer agujeros en ellos para que la solución de encurtido pueda entrar en los pimientos.
Empaquételos todos en un frasco.
En una olla grande, agrega vinagre, ajo, granos de pimienta, sal y azúcar.
Calienta y deja hervir rápidamente, luego reduzca el fuego y cocine a fuego lento unos 2 minutos.
Vierte la salmuera caliente en el frasco, sobre las guindillas y sella con una tapa hermética. Enfriar y refrigerar.
El periodo máximo de conservación es de 2 a 3 meses. Podría a ser más, pero la calidad del producto baja considerablemente.
Conservar chile en aceite de oliva
Conservar guindillas en aceite de oliva le da al aceite un sabor extra, que puede ser por el aceite o algún otro producto que lo acompañe, como el ajo. También pueden ser bastante decorativos.
Limpia bien los pimientos y sécalos. Córtelos por la mitad a lo largo.
Asa los pimientos en un asador o en una parrilla a fuego medio hasta que la piel esté burbujeante y ennegrecida, y luego dejar enfriar. Asegúrate de no cocinar demasiado. También puede colocarlos en bolsas de papel y dejar que se cocinen al vapor para remover la piel fácilmente.
Pela los pimientos y quite las semillas y las entrañas si lo deseas, aunque ten en cuenta que la mayor parte del picante proviene de estas partes.
Corta la pulpa en tiras gruesas.
Agregue las tiras de pimiento asado a un frasco limpio y esterilizado. Vierta suficiente aceite de oliva para cubrir, luego cubra con una tapa de forma hermética.
Refrigera inmediatamente.
Para conservar guindillas con este método debe mantener sus chiles durante una semana en el refrigerador. No está diseñado para almacenamiento a largo plazo, para eso, mejor ver la opción de congelar.
Existen dos métodos más, que es el envasar en conserva y el asarlos, pero son más complicados, sobre todo el de en conserva, por lo que no vamos a indagar más en ello, ya que con lo que te mostramos aquí es totalmente suficiente y preciso.
Como saber si las guindillas están malas
Aquí es la vista la que juega el mejor rol, ya que si ves que tus guindillas están mas blancas que de costumbre, significa que están listas para ir a la basura.
Lo otro que también podemos hacer es tocarlos. Si bien es cierto que luego de conservar guindillas por un tiempo, mientras más tiempo pasen se volverán menos crujientes y más blandos, no obstante, no debería tener una consistencia lacia, como fideo recién cocido, ni siquiera si están escabechados o encurtidos. Así que, si es el caso, a la basura.
Decidiste comprar algunos dátiles para probarlos en un postre o porque una receta lo requería. Pero si es tu primera vez comprándolos, seguramente te vas a preguntar ¿es posible conservar dátiles?
Para conservar dátiles en el corto plazo es posible almacenarlos en la despensa por hasta 2 meses. En caso de climas húmedos y calurosos, reemplazar la despensa por la nevera. Para el largo plazo es posible congelar los dátiles o deshidratar los dátiles por más de un año.
Quédate con nosotros para que puedas aprender a como conservar dátiles de una forma rápida y sencilla
Aspectos generales al conservar dátiles
Bueno, antes de empezar, debemos mencionar que existen varias variedades de dátiles, aunque solo unos pocos son realmente populares. Las más populares son las variedades Deglet y Medjool.
En términos prácticos, si compraste en el supermercado, significa que probablemente sea unas de estas 2 variedades. Pero incluso si tienes una variedad diferente, las pautas para conservar dátiles son prácticamente iguales.
Hay tres opciones cuando se trata de almacenar dátiles. Estos incluyen mantenerlos a temperatura ambiente, como en el supermercado, refrigerarlos o congelarlos.
Al igual que con casi cualquier otra fruta, cuanto más tiempo espere almacenar los dátiles, más frío debería ser el ambiente.
Como conservar dátiles en la despensa
Generalmente los frutos secos se caracterizan por ser poco perecederos, y es por la misma razón es que es posible almacenarlos en la despensa, eso sí, hay que seguir las pautas a continuación para garantizar su calidad durante todo el periodo.
Paso 1. Elegir los mejores dátiles
Es un paso bastante evidente pero no menos importante, ya que, aquellos dátiles que se están poniendo feos puede llegar a contaminar el resto que no esta dañado. Más abajo, tenemos un apartado que explica que ayuda a saber si los dátiles están malos.
Paso 2. Buscar un recipiente hermético.
Un táper de vidrio o plástico funciona bien, lo importante es que cierre herméticamente.
Paso 3. Coloque sus dátiles en el recipiente hermético
Empaque los dátiles tan apretados como desee en el recipiente.
Como constantemente recomiendo, ojalá el contenedor tenga la opción de liberar el aire para sellar al vacío.
Coloque los dátiles en la despensa o en el mueble que tenga en su cocina. El gran secreto aquí es colocar los dátiles en un lugar oscuro lejos de la luz solar, y también lejos de una fuente de calor como el horno o una estufa.
A medida que los dátiles continúan secándose, se pueden formar manchas blancas sobre o debajo de la piel. Estos son cristales de azúcar. Puede disolver los cristales de azúcar a fuego lento y no representa que haya habido un problema al conservar dátiles.
Puede conservar dátiles en la despensa por hasta 2 meses si has seguido los consejos que hemos dejado para ti.
Conservar dátiles en la nevera
La recomendación general es que, para mantener el sabor y frescura de los dátiles suaves, lo mejor es almacenarlos en la nevera. Además, también es útil en aquellos climas tropicales, muy calurosos y húmedos a la vez.
Para conservar los dátiles en la nevera solo tienes que seguir los pasos anterior, pero esta vez, almacenar en la nevera.
Puede preservar los dátiles en el refrigerador hasta por un año si es necesario. El refrigerador mantendrá sus dátiles frescos para cuando tenga ganas de comerlos.
Como congelar los dátiles
¿Se pueden congelar los dátiles? Pues claro que sí, y es en realidad uno de los métodos mas efectivos para mantener la calidad de los dátiles por el largo plazo, ya que, a diferencia de muchas otras frutas, como las manzanas donde hay que hacer un trabajo adicional, los dátiles se congelan muy bien y sin ninguna preparación exhaustiva. Para ello, debemos seguir los siguientes pasos:
Paso 1. Coloque los dátiles en una bolsa para congelar.
Exprime el aire en el interior de la bolsa antes de sellarla. Alternativamente, use un recipiente hermético como táper de plástico o vidrio. Cuando empaques los dátiles en el recipiente, deja espacio libre para permitir la expansión que se produce con la congelación.
Paso 2. Coloca la bolsa en la parte más profunda del congelador.
Colocando el recipiente en la zona mas honda los dátiles se congelarán más rápido, conservando su frescura y sabor. Almacenar los dátiles en el congelador es una gran idea si planeas usarlos en una fecha muy posterior o si no estás seguros de cuándo los usará.
Guarda los dátiles en el congelador hasta por 3 años o más.Puedes conservar dátiles en el congelador durante años si se sellan correctamente. Asegúrate de guardar los dátiles en un recipiente hermético para evitar quemaduras en el congelador.
Es posible conservar dátiles por un largo tiempo porque tienen un contenido muy alto de azúcar. Si echa un vistazo a los datos nutricionales de un dátil Medjool, hay 68 gramos de azúcar por cada 100g de dátiles, por lo que es bastante.
Como descongelar los dátiles
Saca los dátiles del congelador 3 horas antes de usarlos.
De esta manera, los dátiles tendrán tiempo suficiente para descongelarse antes de comerlos o usarlos en una receta. Los dátiles deben tener el mismo sabor que el día en que los compró.
Si necesitas usarlos de inmediato, remoje los dátiles en un recipiente con agua caliente. Deben estar suaves y listos para usar en 30 minutos.
Si después de sacar los dátiles del congelador nota decoloración, pérdida de sabor o un olor a podrido, significa que han expirado.
Deshidratar los dátiles
Este es un método de conservación que a la vez es una receta, ya que se emplea indirectamente para la producción de azúcar de dátil, un sustito natural y más sano a la azúcar granulada que la mayor parte de la población consume. Para deshidratar los dátiles, debemos seguir la siguiente pauta:
Paso 1. Seleccionar los dátiles
Algunos de los dátiles que compramos pueden venir en mal estado, por lo que no tiene sentido conservarlos.
Paso 2. Poner los dátiles en una bandeja
Vamos a usar un horno para realizar la deshidratación, por lo que una bandeja de horno es lo ideal. No obstante, la mejor opción siempre es usar un deshidratador, ya que es un producto diseñado solo para esta función.
Paso 3. Precalienta el horno a 50°C por unos minutos
Antes de poner la bandeja en el horno, necesitamos que el horno ya este caliente. Para ello, se requiere que el horno se deje prendido a unos 50°C por al menos 2 minutos.
Paso 4. Pon la bandeja de dátiles en el hornoa 66°C
Tenemos que poner a secar los dátiles, y la forma de hacerlo es dejando el horno a 66°C. Generalmente se deja un día entero, pero hay que estar constantemente monitoreando ya que solo queremos secar los dátiles, no cocinarlo
Paso 5. Pon los dátiles en un recipiente hermético
Ya cuando los dátiles están totalmente secos, notarás que tiene una textura crujiente más rígida que de costumbre, como quebradiza. En este punto, debes transferir los dátiles a un recipiente hermético y para que preserven su calidad y sabor caracteristico.
Opcionalmente, puedes moler los dátiles y obtener un polvo, llamado azúcar de dátil.
Puedes almacenar en la despensa alejados de la luz solar y un lugar fresco por al menos 6 meses o en también puedes preservarlos en la nevera por al menos 1 año.
¿Cuánto duran los dátiles?
¿Los dátiles caducan? Efectivamente, como la gran mayoría de los alimentos, los dátiles tienen una fecha de expiración que depende fundamentalmente del método utilizado para su almacenamiento, como la ejecución del mismo.
En consecuencia, te dejamos un resumen para saber la vida útil promedio de los dátiles en cada una de sus fases, de tal manera que también puedas tener una noción de como vas a conservar los dátiles.
Método de conservación
Tiempo de duración
Dátiles frescos en la despensa
1 – 2 meses
Dátiles frescos en la nevera
6-12 meses.
Dátiles congelados
1-2 años.
Dátiles deshidratados en la despensa
6 meses.
Dátiles deshidratados en la nevera
12 meses
Las variedades suaves o blandas suelen durar un poco menos, para que lo tengas en mente.
¿Cómo saber si los dátiles están malos?
En primer lugar, si los dátiles tienen una película blanca, están bien. La condición es reversible: simplemente coloque los dátiles a la luz del sol durante un tiempo o en el microondas en una bolsa con cierre con unas gotas de agua durante 30 segundos.
Pero si los dátiles se vuelven más oscuros o tienen algún signo de moho, deséchalos. Lo mismo ocurre cuando huelen mal o están podridos.
Si su apariencia es buena y el olor es como de costumbre, dele una probada y en base a esto, decida qué hacer con ellos. Si el sabor no está a su nivel, no dude en desecharlos por motivos de calidad. De lo contrario, están perfectamente bien para comer.
Hasta aquí llega este articulo para conservar dátiles. Te dejamos a continuación otros alimentas que puedes conservar.
El pan es uno de los alimentos que más se consumen en todo el mundo, pueden ser dulces, salados, esponjosos o crujientes, también se pueden rellenar o untar con una infinidad de ingredientes, pero, ¿Cómo se conserva el pan?
Puedes guardar los panes caseros o artesanales a temperatura ambiente de 2 a 4 días, o congelarlos por 3 meses. Este tipo de pan no lo debes refrigerar porque se reduce su tiempo de vida útil y calidad.
A continuación te explicaré en detalle lo que debes hacer para preservar el pancorrectamente.
¿Cómo conservar el pan?
Por lo general, la mayoría de los panes se hacen con una buena cantidad de grasa, que resulta ser un muy buen conservante debido a las propiedades de los aceites.
Asimismo, algunos tipos de harina contienen un buen porcentaje de grasa natural en su haber, como la harina de almendras, y esto puede hacer que el pan dure un poco más de tiempo.
No obstante, la mayoría de los panes se preparan con harina de trigo, por lo que el tiempo de duración de los panes puede variar en menor o mayor medida dependiendo de los ingredientes y del tipo de pan que se quiere preparar.
Conservar pan a temperatura ambiente
Una cosa muy importante que tienes que saber con respecto a los panes es que estos necesitan respirar para poder mantenerse frescos, por eso muchas panaderías los empacan en bolsas de papel ya que le permiten al pan transpirar.
En especial, si el pan es de corteza gruesa y/o crujiente, hay un utensilio especial que sirve para mantener el pan en buen estado y es la caja de pan. Por lo que si eres de comprar o hacer muchos panes, valdría la pena invertir en uno.
Sin embargo, si el pan ya fue cortado o picado, entonces si convine mantenerlo en un recipiente o bolsa hermética para retener la humedad todo lo posible y no se sequen y pongan duro tan rápidamente.
Teniendo en cuenta todo esto, procederé a explicarte cómo debes almacenar el pan:
Paso 1: Esperar que el pan se enfríe.
No hay nada mejor que comer un pan recién hecho, pero si compraste u horneaste una buena cantidad para comer en los próximos días, te conviene esperar que se enfríen un poco antes de almacenarlos.
Sobre todo si preparaste un pan grande y solo comiste la mitad o una parte de este, ya que después tendrás que guardarlo en un recipiente hermético.
Paso 2: Meter en una caja para pan, bolsa o recipiente.
Si los panes no están picados, te conviene guardar tu pan en una caja para panes, o ponerlo dentro de una bolsa de papel. En cambio, si ya picaste el pan, lo mejor es guardarlo dentro de un recipiente o bolsa hermética.
Paso 3: Almacenar el pan en un lugar oscuro y fresco.
Debes colocar el pan en un lugar donde no le pegue el calor o la luz directamente, y que esté libre de humedad. Así el pan de cualquier tipo podrá mantenerse en buen estado entre unos 2 o 4 días a temperatura ambiente. [1]
Pero si el pan es de fabricación industrial (estos son los que se encuentran mayormente en supermercados), bastará con dejarlos en sus bolsas plásticas y guardarlos en un lugar oscuro, fresco y secode entre 14 a 18 días a temperatura ambiente.
No obstante, si este pan no fue abierto, se mantendrá en buen estado hasta la fecha de vencimiento que señala el fabricante, siempre y cuando la temperatura en el lugar no supere los 20°C y no haya mucha humedad en el ambiente.
Conservar pan en la nevera
Generalmente, las neveras proporcionan un entorno frío ideal para preservar algunos alimentos, por eso mismo, también suelen ser húmedos, y los panes absorben la humedad del ambiente como si fueran esponjas.
Por tal motivo no se aconseja guardar los panes caseros en la nevera, ya que corren el riesgo de cambiar su textura. Sin embargo, si el pan está picado podría refrigerarse si se aísla bien el pan.
Los panes que se consiguen en los supermercados o tiendas de comida, que vienen ya empaquetados en bolsas plásticas, es decir, que se preparan de manera industrial, suelen conservarse mejor en la nevera debido a los conservantes y recipientes en los que vienen.
Así que si tienes planeado almacenar el pan en tu heladera, te aconsejo seguir estas recomendaciones:
Paso 1: Esperar que el pan se enfríe.
En caso de que sea un pan artesanal (lo que venden en panaderías) o casero, debes esperar que se enfríe antes de guardarlo ya que el vapor interno crearía humedad y eso no traería bueno.
Paso 2: Poner dentro de un recipiente hermético.
Para el pan casero o artesanal picado, conviene que lo envuelvas con papel encerado, que mantiene a raya la humedad, aunque también puedes utilizar film plástico, papel aluminio o una bolsa plástica, antes de guardarlo dentro del recipiente.
Si el pan es de fabricación industrial, y no lo has destapado, bastará con dejarlo en su bolsa, si lo destapaste o la bolsa está rota o agujereada ponlo en un recipiente hermético.
Paso 3: Etiquetar.
Sobre la bolsa o recipiente escribe la fecha de almacenamiento del pan, o pega una etiqueta que contenga esta información.
Paso 4: Guardar el pan en la heladera.
Ponlo en una zona fresca, que no esté muy fría (cerca de la puerta del refrigerador). El pan casero o artesanal podrá estar entre 7 a 14 días en la nevera, mientras el de fabricación industrial entre 2 a 3 semanas. [2][3]
Cabe señalar que el pan de fabricación industrial si nunca fue destapado, podrá mantenerse hasta la fecha de vencimiento que se puede ver en el empaque. Además, los panes aplanados, como el pan pita, solo podrán estar en la nevera de 4 a 7 días. [4]
¿Cómo congelar el pan?
¿Se puede congelar el pan? Sí, claro que puedes congelar el pan, y si quieres preservarlo el máximo tiempo posible esta la opción a considerar, para ello sigue tienes que seguir estos pasos:
Paso 1: Esperar que el pan se enfríe.
Si el pan está recién hecho, debes esperar que se enfríe completamente antes de congelarlo.
Paso 2: Envolver.
Envuelve el pan con papel film o de aluminio para evitar que sufra quemaduras por congelamiento. Los panes de fabricación industrial puedes dejarlo en su empaque original.
Paso 3: Poner dentro de una bolsa para congelar.
Esta bolsa tiene que ser hermética para que pueda proteger mejor el pan.
Paso 4: Etiquetar.
Escribe la fecha de almacenamiento del pan sobre la bolsa.
Paso 5: Guardar el pan en el freezer.
El pan de cualquier tipo podrá permanecer congelado durante unos 3 meses.
¿Cómo conservar el pan tostado?
En el caso de que te hayan sobrado algunas rebanadas de pan que tostado, o que hayas comprado pan que ya venía tostado en el supermercado, puedes conservarlos de manera similar al pan regular.
Es decir, lo metes dentro de una bolsa o recipiente hermético en un lugar oscuro, seco y fresco por 3 o 5 días a temperatura ambiente, 7 días en la nevera. También podrías congelarlo por uno o dos meses.
Los panes que compraste tostados en el supermercado permanecerán en buen estado hasta la fecha de vencimiento si no has abierto el empaque, y que no tenga agujeros o cualquier otro daño.
¿Cómo conservar pan rallado o molido?
El pan molido o pan rallado se utiliza especialmente para empanizar. Puedes prepararlo en casa, horneando pan o utilizando un pan que ya se haya endurecido (aunque en este caso no durará mucho).
También lo puedes conseguir en tiendas de comida, estos tienen una duración mucho más extensa ya que vienen, por lo general envasados en recipientes herméticos.
Pero en el caso de que hayas comprado pan rallado en bolsa o preparado en casa, lo tienes que almacenar del siguiente modo:
Paso 1: Pasar el pan rallado a un frasco de vidrio.
Aunque puedes usar un recipiente o bolsa hermética hecho de plástico, el pan rallado se conservará mejor en un recipiente de vidrio con tapa hermética o de rosca.
Paso 2: Guardar el frasco bien tapado.
Puedes guardar el frasco con pan molida a temperatura ambiente en un lugar fresco, oscuro y libre de humedad por 6 meses. También lo puedes refrigerar de 8 a 10 meses.
Además lo puedes congelar de 1 a 2 años en un recipiente o bolsa hermética que pueda resistir el congelador.
Si utilizaste pan viejo, es decir, que se endureció luego de varios días almacenado, el tiempo de vida util no será el mismo que el hecho con pan fresco. En este caso, te convendrá usarlo pronto o guardarlo en la nevera por hasta 1 semana.
¿Cómo saber si el pan se puso malo?
Puedes notar si tu pan se echó a perder por el olor que emite, si huele rancio ya está dañado. Otra manera de determinar su mal estado es probándolo.
Si al probar un pedazo de pan, este tiene un muy mal sabor, ¡escúpelo! Cuando su sabor se vuelve malo es porque se descompuso, así que lo mejor será que lo tires para no sufrir después un malestar estomacal.
A simple vista también se puede notar el estado del pan, si ves que tiene manchas verdes o negras, es señal de que desarrolló moho y por ende, ya está completamente dañado.
La mayoría de los panes al guardarlo demasiado tiempo a temperatura ambiente, se puede endurecer, aunque esto no significa que sea peligroso ingerirlo, si convendría utilizarlo lo más pronto posible porque no tardaría en ponerse malo.
Si en el ambiente donde guardaste el pan hay mucha humedad, este lo absorberá y hará que se torne correoso y pegajoso al tacto.
¿Por qué se echa a perder el pan?
Los panes se pueden echar a perder por diversos motivos, uno de ellos se debe a la levadura. Prácticamente todo los panes llevan este ingrediente que, mediante un proceso de fermentación, le concede su aroma y sabor.
No obstante, los componentes de la levadura hacen que el pan vaya “envejeciendo”, incluso antes de hornearlo. Por lo que de no contar con un ambiente que paralice la acción de este ingrediente, el tiempo de vida útil del pan se verá acortado.
Los cambios de temperatura también afectan negativamente el pan. Un ambiente demasiado caluroso y ventilado, hará que el pan pierda su humedad y la miga se vaya endureciendo.
Pero si el ambiente está muy húmedo o frío, hará que el pan se torne correoso o chicloso, propiciando un entorno perfecto para que se desarrolle el moho y otros microrganismos perjudiciales para la salud.
Otras de las principales amenazas del pan son los hongos, como aspergillus y penicillium, que se desarrollan en un ambiente húmedo. El oxígeno y la luz son otros aspectos que se deben tener en cuenta, ya que estos aceleran aún más el deterioro del pan.
¿Cuánto dura el pan?
La respuesta a esta interrogante dependerá del tipo de pan y de la forma en cómo fue almacenado. De cualquier modo, abajo que dejaré un cuadro que resume el tiempo de conservación del pan.
Producto
Duración
Pan casero o artesanal a temperatura ambiente
2 – 4 días
Pan de fabricación industrial abierto a temperatura ambiente
14 – 18 días
Pan casero o artesanal refrigerado
7 – 14 días
Pan aplanado (pan pita)
4 – 7 días
Pan de fabricación industrial abierto refrigerado
2 – 3 semanas
Pan de fabricación industrial sellado a temperatura ambiente o refrigerado
Hasta la fecha de vencimiento
Pan congelado (cualquier tipo)
3 meses
Pan tostado a temperatura ambiente
3 – 5 días
Pan tostado refrigerado
7 días
Pan tostado congelado
1 – 2 meses
Pan tostado de fabricación industrial sellado
Hasta la fecha de vencimiento
Pan rallado casero a temperatura ambiente
6 meses
Pan rallado casero
8 – 10 meses
Pan rallado casero
1 – 2 años
Pan rallado de venta comercial
Hasta la fecha de vencimiento
¿Cuál es el mejor modo de conservar el pan?
Pues depende del uso y de la cantidad de pan que tengas. Por ejemplo, si no tienes muchos panes, y los que tienes los comerás pronto, la mejor manera de preservar el pan sería guardándolo a temperatura ambiente en un recipiente o bolsa que permita que el pan respire.
La nevera no es una opción que se debe tener en cuentacuando quieras almacenar pan, a no ser que sea de fabricación industrial, un pan aplanado o el ambiente donde vives no es el idóneo para guardarlo a temperatura ambiente.
Ahora si lo que quieres es preservar el pan a largo plazo, la mejor opción es guardarlo en el freezer. No hay mejor opción, el pan se mantendrá bien y la textura no cambiará mucho al descongelarse.
El pan rallado suele durar mucho tiempo si se mantiene sellado en un frasco de vidrio. El pan tostado por su parte, suele tener un tiempo de vida similar al pan sin tostar.
Si quieres saber cómo almacenar algún otro alimento o producto, siéntete libre de buscar todo lo que quieras en este sitio, ya que cuenta con una vasta lista de temas concernientes a la conservación.
Con los métodos que vas a ver a continuación vas a poder conservar bizcochos como si estuvieras en una pastelería, pero será en tu casita, así que quédate con nosotros para que sepas como hacerlo.
Ya sabes, nunca esta demás tener un bizcocho a mano para hacer galletitas o cupcakes, y más aún si el día esta un tanto frío, ya que nos calentarán el corazón ❤️, ¡pero OJO! también podemos tener la base para una rica torta.
Se me estaba haciendo agua la boca escribiendo así que mejor comenzamos sin más.
Conservar bizcocho cocido
Para poder conservar bizcocho que este cocido, no vamos a tener que hacer algo muy diferente a cuando este crudo. Solo se diferencian en que, al estar cocido, hay que esperar a que se enfríe para poder almacenarlo
Almacenamiento a corto plazo
Para conservar bizcocho en el corto plazo, podemos usar la temperatura ambiente, pero lo mejor es fiarse de las temperaturas más bajas que nos provee el refrigerador.
Enfríe el bizcocho cocido durante unos 30 minutos en una parrilla. Saque el bizcocho horno una vez que se termine de cocinar. Si tienes una parrilla, pon el bizcocho ahí. De lo contrario, utiliza toallas de papel o a una bandeja para hornear fría. Para conservar el bizcocho hay que esperar a que se enfríe por completo.
Tienes que tener en cuenta que la bandeja para hornear que usaste originalmente para preparar tu bizcocho va a estar caliente. Esto puede hacer que el bizcocho se cocine en exceso, por eso hay que utilizar otro apoyo.
Mueva el bizcocho a un recipiente hermético. Esto es como el tema de las masas de pizza, el procedimiento es casi igual. Pon el bizcocho en bolsas de plástico o algún recipiente en el que puedas liberar la mayor cantidad de aire. Si queda mucho aire dentro del recipiente, el bizcocho almacenado va a tender a secarse más rápido de lo habitual.
Otra opción es envolver el bizcocho firmemente en unas pocas capas de papel de aluminio o papel aluza, para exponerlas menos al aire. La mejor estrategia para conservar bizcochos es alejarlos del aire.
Refrigera el bizcocho hasta por 1 semana si tiene ingredientes perecederos. Aquí depende un poco de los ingredientes con los que acompañaste al bizcocho, pero en teoría, si tienen algún tipo de queso o cremas deberían durar 1 semana sin problemas en el refrigerador siguiendo los pasos anteriores
Si el bizcocho que huela mal o se ve mohoso, ya sabes que debe ir a la basura.
Mantenga el bizcocho hasta 2 días si se almacenan a temperatura ambiente. Siempre y cuando el bizcocho se almacene correctamente, se pueden dejar fuera del refrigerador. Póngalos en el mostrador o en un armario. Desafortunadamente, se secarán con el tiempo, así que opte por un método de almacenamiento diferente si no espera usarlos de inmediato.
El almacenamiento a temperatura ambiente puede ser adecuado si no hiciste muchos bizcochos. Mantenga lotes más grandes en el refrigerador para evitar que se conviertan en piedra tan rápido como lo harían en el mostrador.
Almacenamiento a largo plazo
En el caso del largo plazo, la opción será siempre el congelador.
Almacene el bizcocho durante un máximo de 3 meses si se congela. Para congelar bizcochos, es lo mismo que cuando lo metes en el refrigerador como mencionamos anteriormente, pero ahora van al congelador. Es decir, vamos a utilizar bolsas de plástico y dejarlo lo más al vacío posible
Al conservar bizcocho en el congelador damos un rango máximo de 3 meses, pero la verdad es que el producto puede durar más, pero no tiene gracia terminar comiendo un producto que no sabe tan bien como en un comienzo, ¿Supongo no?
Conservar bizcocho crudo
Cuando tu masa esta cruda, es mucho mejor, ya que la puedes moldear y cortar para optimizar el espacio en el congelador, a menos que tengas una medida en la cual no puedas cambiar. En cualquier caso, deberíamos empezar de esta forma:
Corta la masa en círculos gruesos de 2,5 cm. Prepara la masa como lo harías normalmente al hornear el bizcocho. Después de hacer la masa, divídala con un cortador de pastelería o una espátula. La idea es tratar de mantener el bizcocho del mismo tamaño que cuando lo pones en el horno.
Poner el bizcocho crudo en una bandeja para hornear reposando sobre papel para hornear. Extienda el bizcocho en una sola capa en la bandeja. Usa papel para hornear o antiadherente para que la masa no se pegue a la bandeja. Si no tiene papel de pergamino, puede poner la masa directamente en la bandeja, pero puede que después te cueste más remover la masa ya que estará pegada, así que tendrás que ayudarte con harina o sémola.
La masa preenvasada o comercial simplemente se puede poner en el congelador. No tienes que cortarlo primero, aunque esto puede hacer que hornear el bizcocho sea más fácil más tarde.
Cubra la masa y congélela durante un máximo de 3 horas. Envuelve completamente la bandeja con papel plástico. La masa cruda puede congelarse rápidamente, así que compruébala cada 30 minutos. Espera hasta que la masa se endurezca, lo notarás porque sonara duro si golpeas con tu nudillo.
Evite dejar la masa en el congelador durante demasiado tiempo, ya que podría secarse.
Mueva la masa congelada a un recipiente sellado. Rompe la envoltura que hiciste con papel plástico y coloca el bizcocho en recipientes herméticos en los que puedas liberar el aire. Si hiciste mas de uno, puedes ponerlos en la misma, no es necesario que queden separados para conservar bizcocho de una forma óptima.
También puedes envolver la masa en papel de aluminio o envoltura de plástico.
Congele el bizcocho durante un máximo de 3 meses. Guarde la masa sellada en el congelador hasta que esté lista para usarla. La masa almacenada de esta manera durará indefinidamente, aunque puede comenzar a perder calidad después de 3 meses (ver fuente de información).
A diferencia del bizcocho cocido, este que esta crudo no tiene tanta lógica conservar bizcocho crudo para corto plazo, por eso esta parte del articulo esta más enfocado en el largo plazo. No obstante, si quieres usar la masa de un día para otro, solo tienes que guardarla en el refrigerador en un recipiente hermético.
Como descongelar bizcocho
La mejor manera para poder descongelar el bizcocho, dependiendo del tamaño de este, es dejándolo en el refrigerador toda la noche, pero mientras más pequeña la masa, más rápida se descongelará.
Tal como cuando pusimos a congelar, desempaca los bizcochos de la bolsa de plástico y ponlos en una bandeja que forraremos con papel plástico, ya que como dijimos, la mejor estrategia para conservar bizcochos es alejarlos del aire.
Además te recomiendo que pongas un poco de harina en el interior que ayudará a secar la masa, pero también para evitar que se pegue a la bandeja.
Si llegaste hasta aquí es porque sabes que el brócoli tiene una mala fama para permanecer un periodo largo… pero no hay que preocuparse, nosotros siempre tenemos la respuesta para conservar brócoli. ¡Sigue atento!
Almacenado incorrectamente, el brócoli puede pasar de crujiente y refrescante a no ser apetecible en solo un día o dos. Sin embargo, con las técnicas de almacenamiento inteligente, puedes conservar brócoli fresco durante cinco a siete días.
Y si utilizamos otro método puede durar mucho más incluso, ¿quieres saber cuál es este método? Apostaría que si eres uno de nuestros lectores sabrás que es, pero sino, más abajo te lo explicamos.
Conservar brócoli a corto plazo
Para conservar brócoli a corto plazo tenemos 2 métodos diferentes, uno funciona como cuidar flores frescas, y el otro es en base a una envoltura.
Método 1: Haz un ramo de brócoli
Una forma poco convencional pero sorprendentemente efectiva de mantener su brócoli fresco es similar a la forma en que podría mantener una selección de flores en un florero. Simplemente ponga su cabeza de brócoli, tallo hacia abajo, en un tazón con media pulgada de agua en la parte inferior.
La cabeza debe apuntar fuera del tazón. Terminado esto, ponlos en el refrigerador. Conservar brócoli de esta manera te otorgará frescura durante unos cinco a siete días.
Si quieres optimizar el método anterior, cubre la cabeza del brócoli con una bolsa de plástico que tenga pequeños orificios para que pueda llegar un poco de aire.
Método 2: Envuelva el brócoli en toallas de papel húmedas.
Envuelva las cabezas con una toalla de papel para que la toalla absorba parte de la humedad. Mantenga el brócoli en la nevera. Debe permanecer fresco durante unos tres días.
Consejo: No envuelvas el brócoli demasiado herméticamente con las toallas de papel y no lo guarde en un recipiente sellado. El brócoli necesita flujo de aire para mantenerse fresco.
Tip 1: Lave el brócoli de cosecha propia, pero no el brócoli comprado en la tienda.
Cuando se trata de conservar brócoli, la humedad tiene un rol de doble filo, poca es buena, en exceso es mala. La humedad puede promover el crecimiento del moho en tan solo unos pocos días, convirtiendo esa cabeza de brócoli de algo fresco a no comestible.
Por esta razón, querrás evitar lavar el brócoli fresco que compras en la tienda, ya que ya ha sido lavado y secado y por lo tanto no requiere limpieza adicional. Sin embargo, en el que cultivamos hay que eliminar pequeños insectos y escombros del jardín. Después de lavar el brócoli de cosecha propia, asegúrese de secarlo a fondo para evitar el moho y poder conservar brócoli de forma segura.
La mejor forma de lavar el brócoli es usando agua tibia y unas cucharaditas de vinagre blanco. Hay que remojar el brócoli durante unos 15 minutos para matar cualquier insecto pequeño y eliminar los restos que puedan estar escondidos. Retira los brócolis ya remojados, enjuaga con agua fría y seca bien antes de refrigerar.
Tip 2: Lleva tu brócoli a la nevera lo más rápido posible.
Independiente el método que uses para conservar brócoli, la regla de oro es clara: debes meterlo tan rápido como puedas… en la nevera, obvio. Algunas fuentes recomiendan que incluso el brócoli fresco comprado en la tienda debe llegar a la nevera dentro de los 30 minutos de la compra. Cuanto más rápido entre el brócoli en la nevera, mayor serán tus probabilidades de conservar el brócoli firme y fresco, aparte que también puede durar más.
También puedes ayudarte de recipientes que se especialicen en el cuidado de frutas y verduras basados en el balance de oxígeno y dióxido de carbono como este que te dejamos a continuación. Es calidad garantizada, solo es cosa de ver la cantidad de reviews y compras que tiene.
Si leíste la intro de seguro querías llegar hasta aquí para poder saber como conservar brócoli a largo plazo, y bueno, debo decirte que la cuestión era muy fácil, todo recae en la congelación. ¿Cómo congelar brócoli? Vamos allá.
Paso 1: Preparar agua hirviendo y helada.
Los métodos discutidos anteriormente son ideales para mantener tu brócoli fresco a corto plazo, pero si tienes tanto brócoli que no crees que podrás comerlo todo antes de que salga mal o simplemente no planees comerlo de inmediato, considera congelarlo.
El brócoli congelado puede permanecer bueno durante más de un año, por lo que tendrás mucho tiempo para incorporarlo a tus platos antes de que salga mal. Sin embargo, congelar el brócoli no es tan simple como meterlo en el congelador y voila, primero, tiene que estar preparado en un proceso llamado blanqueamiento.
Para empezar, querrás preparar una olla grande de agua hirviendo junto con una olla o un tazón de agua helada igualmente grandes, ya que vas a transferir el brócoli de una olla a la otra para poder conservar brócoli.
Paso 2: Corta las cabezas de brócoli en trozos pequeños.
Mientras hierve el agua, aprovecha la oportunidad de usar un cuchillo para cortar las cabezas de brócoli en trozos pequeños. Las piezas de la cabeza no deben ser grandes que unos 2,5cm, para que te hagas una idea deben ser del máximo grosor de tu dedo.
La importancia de dividir las cabezas de brócoli en trozos más pequeños yace en que si no lo haces, el agua hirviendo puede blanquear el brócoli de manera desigual al afectar los bordes exteriores del brócoli con más fuerza que la parte interna protegida, ya que es como un pequeño arbusto.
Paso 3: Hervir las piezas de brócoli durante tres minutos.
Este es el famoso proceso del blanqueamiento. Cuando hayas separado todos tus trozos de brócoli, ponlos en agua hirviendo para blanquearlos. No necesitan hervir durante mucho tiempo, tres minutos es más que suficiente. Revuelve periódicamente para asegurarte de que las piezas de brócoli estén blanqueadas uniformemente.
Todas las verduras en general contienen enzimas y bacterias que pueden hacer que el color, la textura y el sabor de la verdura se vuelvan poco apetecibles durante la congelación, al hacer un blanqueamiento se detiene esta actividad enzimática y terminas por conservar brócoli en un estado similar al inicial, incluso a veces mejor.
Paso 4: Enfríe las piezas de brócoli durante tres minutos.
Tan pronto como las piezas de brócoli hayan hervido durante unos tres minutos, escúrrelas con un colador. Luego, cuando el exceso de agua caliente haya fluido a través del colador y no represente peligro de quemarte, tíralos inmediatamente a tu agua helada.
Dejar que se empapen en el agua helada durante unos tres minutos, revolviendo ocasionalmente para asegurarse de que todas las piezas entren en contacto con el agua fría.
El propósito del agua helada es enfriar inmediatamente el brócoli hacia abajo para que no continúe cocinando. El brócoli se hierve para blanquearlo, no para cocinarlo — si se le permite seguir cocinando, el brócoli eventualmente se volverá suave y poco apetecible.
Poner piezas de brócoli caliente directamente en el congelador no enfría el brócoli humeante tan rápido como el contacto directo del agua helada, por lo que esta última es una mejor opción para conservar brócoli
Paso 5: Escurrir y secar.
Después de que el brócoli se haya empapado en el agua helada durante unos tres minutos (debe sentirse tan frío como el agua cuando lo toca), vierta en un colador o colador y permita que descanse brevemente. A medida que descansa, el brócoli ocasionalmente permite que la humedad atrapada drene. Después de uno o dos minutos, dale una palmada con un trapo limpio o una toalla de papel para eliminar el exceso de humedad.
Paso 6: Conservar en una bolsa sellada en el congelador.
Pon las piezas de brócoli a una bolsa de plástico con un sello hermético y etiqueta la bolsa con la fecha de hoy. Aprieta el exceso de aire de la bolsa, y al congelador. ¡En este punto, ya terminaste! Una vez que se congela, puedes conservar brócoli hasta un año pero siempre lo recomendable son 6 meses (ver fuente).
Los dispositivos especiales de sellado al vacío (como el FoodSaver) son ideales para congelar brócoli u otras verduras en general. Al eliminar todo el aire de la bolsa o recipiente en el que se almacena el brócoli, pueden prolongar su vida útil del congelador y mantener el brócoli más fresco que con los métodos ordinarios de congelación. Sin embargo, estos dispositivos pueden ser costosos.
Como descongelar brócoli
Ya sabemos lo que hay que hacer para conservar brócoli, pero aun no sabemos como lo vamos a volver a llevar a su estado «normal».
Bueno, para muchas recetas (especialmente recetas de hornear), no vas querer descongelar las verduras antes de cocinar, ya que esto puede eliminar el contenido de humedad del plato final. Sin embargo, para las recetas que requieren brócoli descongelado, todo lo que necesita hacer es remojar el brócoli en agua a temperatura ambiente durante unos minutos para descongelarlo.
Existen muchos tipos de jamón, pero el más consumido es el jamón cocido, aunque también son muy populares los jamones curados, como el serrano o prosciutto, pero, ¿cómo se conserva el jamón?
El jamón entero cocido lo puedes guardar durante una semana dentro de la nevera, picado o rebanado (en lonjas) se mantendrá de 3 a 5 días. También lo puedes congelar durante 1 y 2 meses.
Para conocer más detalladamente cómo conservar jamón solo sigue leyendo.
Cómo conservar el jamón crudo y sin curar dentro la nevera
Cuando se habla de jamón crudo y sin curar, se hace en referencia a la carne que se obtiene de las patas traseras del cerdo, es decir, del pernil o pierna de cerdo. Por lo tanto, no es propiamente un “jamón”.
Sin embargo, para todos aquellos que les gusta preparar su propio jamón y evitar cualquier aditivo, puedes mantener el pernil o jamón crudo en la nevera, en la parte más fría, dentro de una bolsa hermética por hasta 3 días.
Luego de haber preparado y cocinado este jamón, espera a que se enfría antes de guardarlo dentro de un recipiente o bolsa hermética. Coloca el jamón sin curar cocinado en una zona de tu nevera que se mantenga muy fría y podrá durar de 3 a 4 días.
Cómo congelar el jamón crudo
¿Se puede congelar el jamón crudo? La pierna de cerdo que no está curada ni cocida se debería mantenerse mejor dentro del freezer. Para congelarlo solo tienes que hacer lo que te indico:
Paso 1: Envolver el jamón crudo con plástico.
Antes de envolver todo el jamón crudo, primero secalo con un trapo de cocina limpio o con papel absorbente. Luego envuélvelo bien con film plástico.
Puedes considerar picar el jamón para así descongelar solo la porción que quieras usar después.
Paso 2: Embolsar el jamón crudo.
Luego ponlo dentro de una bolsa plástica apta para congelar.
Paso 3: Escribir la fecha de almacenamiento del jamón crudo.
Anota con un marcador, la fecha encima de la bolsa, junto con el nombre del producto.
Paso 4: Guardar el pernil dentro del freezer.
El jamón crudo o pernil puede estar congelado durante 6 meses. [1]
Para descongelarlo, pásalo a la nevera y déjalo ahí unas 24 o 48 horas, dependiendo de lo congelado y grande que sea la pierna de cerdo, luego de esto tendrás que consumirlo o cocinarlo todo, ya que no se puede volver a congelar.
Cómo conservar el jamón cocido dentro de la nevera
Este es el tipo de jamón más consumido a nivel global, por lo que es el primero que se nos viene a la mente cuando hablamos de jamón. Vienen sellados en plástico, y es preferible mantenerlos de ese modo hasta que se vaya a consumir.
Para mejor protección coloca el bloque dentro de una bolsa, y así, el jamón cocido sin abrir podrá estar hasta la fecha de caducidad. Si el plástico se rompió, pero no has picado el jamón, envuélvelo con film transparente antes de meterlo a la bolsa y así se aguantará unos 7 días dentro de la nevera.
Una vez que hayas picado el jamón, puedes envolver los trozos con film plástico, meterlo en una bolsa hermética, y refrigerar de 3 a 5 días.
Ahora bien, en caso de que hayas comprado jamón cocido en rebanas o lonjas, procede a guardarlo de la siguiente manera:
Paso 1: Colocar papel en un recipiente hermético.
Antes de meter el jamón cocido rebano dentro de un recipiente hermético, coloca papel absorbente al fondo del mismo.
Paso 2: Meter el jamón cocido al recipiente.
Coloca las rebanas de jamón dentro del envase plástico, y antes de cerrar, pon otra capa de papel absorbente encima.
Paso 3: Guardar el jamón cocido en la heladera.
Coloca el envase en la parte más fría de tu heladera, de este modo, el jamón cocido rebanado (en lonjas) podrá estar de 3 a 4 días dentro de la nevera. [2]
Cómo congelar el jamón cocido
El jamón cocido también lo puedes congelar en caso de que te lo estés preguntando, y para hacerlo de la manera correcta sigue mis indicaciones:
Paso 1: Realizar doble envoltura al jamón.
Si tienes el bloque entero de jamón te recomiendo picarlo en trozos de menor tamaño o rebanarlo, por cuestiones de practicidad. Primero envuelve las porciones con film plástico, después con papel aluminio.
En caso de que hayas rebanado el jamón, junta varias lonjas dentro de papel aluminio y luego lo cubres con plástico para envolver. Y si quieres dejar el bloque de jamón completo, no le quites el plástico que lo mantiene sellado.
Paso 2: Embolsar el jamón cocido.
Coloca el jamón cocido, o las porciones, dentro de una bolsa hermética. Las partes más pequeñas de jamón también pueden ponerse dentro de un envase hermético resistente al freezer.
Paso 3: Poner la fecha.
Escribe la fecha de almacenamiento del jamón cocido sobre la bolsa o envase.
Paso 4: Guardar el jamón cocido en el freezer.
Así el jamón cocido, bien sea entero, picado o rebanado, podrá estar congelado por 1 o 2 meses. [3]
Cómo conservar el jamón curado
Entre los jamones curados más conocidos se encuentran el prosciutto, el jamón ibérico y el jamón serrano.
Algunos jamones curados presentan la particularidad de poder almacenarse a temperatura ambiente, además, de poder guardarlos en el refrigerador o el freezer.
Cómo conservar el jamón curado a temperatura ambiente
El jamón curado lo puedes mantener a temperatura ambiente, siempre y cuando aún conserve el hueso, no haya sido picado y permanezca sellado en su envoltura.
A pesar de que en el proceso de curación, el jamón no cuenta con protección de ningún tipo, lo cierto es que este procedimiento se lleva a cabo en ambientes sumamente controlados, para evitar que el jamón se contamine.
Por lo que una vez que compres una pierna de jamón curada, y esta tenga el hueso y este sellada, puedes guardar a temperatura ambiente dentro de un bolso especial para guardar jamón, o dentro de una bolsa plástica lo suficientemente grande, que luego amarrarás muy bien (puedes usar cinta adhesiva para sellar la bolsa).
Después debes buscar un sitio muy fresco, oscuro y libre de humedad, para poner el jamón curado. Algunos expertos aseguran que si los mantienes colgado sería mejor, pero esto no es necesario.
Teniendo en cuenta todo esto, el jamón curado se conservará por todo un año aproximadamente. [4]
Cómo conservar el jamón curado en la nevera
Una vez que rompas el plástico protector y, sobre todo, que piques o rebanes el jamón curado, debes mantenerlo en frío todo el tiempo, ya que no es tan resistente como se puede llegar a creer.
Paso 1: Cubrir el jamón curado.
Una vez que piques el jamón curado, cubre la pierna con papel pergamino o film plástico.
Y si lo rebanaste, o quieres almacenar las porciones que rebanaste, envuelve varias porciones en papel pergamino o encerado, antes de colocarlo en una bolsa o envase hermético.
Paso 2: Escribir la fecha de almacenamiento del jamón curado.
Anota esa información directamente sobre la bolsa, aunque también puedes escribirla en una etiqueta que luego pegarás a la bolsa o envase.
Paso 3: Guardar el jamón curado en la parte más fría de la nevera.
No coloques el jamón cerca de quesos, u otros alimentos de olores fuertes, y debe estar en la parte más fría, ahí el jamón curado y picado se podrá mantener de 5 a 7 días.
Pero si almacenaste el jamón curado y sellado dentro del refrigerador, podrá aguantar hasta la fecha de vencimiento o entre 12 o 18 meses.
Cómo congelar el jamón curado
¿Se puede congelar el jamón curado? Por supuesto, al igual que los otros tipos de jamón, para ello, solo sigue mis indicaciones:
Paso 1: Envolver el jamón curado.
Si el jamón se encuentra entero y sellado, puedes descartar este paso. De lo contrario, lo más práctico será terminar de picar el jamón y envolver los trozos con papel encerado y luego con otra capa de papel film.
Paso 2: Colocar el jamón curado dentro de una bolsa para congelar.
Pon el jamón dentro de una bolsa plástica que resista el freezer, aunque los trozos o rebanadas también lo puedes colocar dentro de un envase hermético resistente al congelador.
Paso 3: Escribir la fecha.
Coloca la fecha de almacenamiento en la bolsa o envase, o escríbela en una etiqueta, que después pegues al recipiente.
Paso 4: Almacenar el jamón curado en el freezer.
El jamón curado (en trozos grandes o entero) podrá estar congelado durante 3 o 4 meses, mientras que las rebanadas o lonjas solo se podrán mantener por un mes.
Se descongela del mismo modo que los otros jamones, en la nevera por 24 o 48 horas, dependiendo de lo grande que sea, y puede mantenerse refrigerado por 4 días más.
Cómo conservar el jamón enlatado
En las tiendas de comidas también puedes conseguir jamón enlatado, que pueden venir pequeños bloques de jamón o como jamón endiablado.
Por lo general, si estas latas de jamón se encuentran en un estante común del supermercado o tienda, mientras se mantengan sellados, estarán en buen estado a temperatura ambiente hasta lo que indique la fecha de caducidad.
Si la lata de jamón dice que el producto debe mantenerse refrigerado, consérvalo de ese modo. De lo contrario, se echará a perder antes de que lo destapes.
Una vez que abras la lata y te sobró algo, pasa el contenido restando a un envase o bolsa hermética, y guárdalo en la nevera, de esa forma, el jamón enlatado podrá mantenerse refrigerado de 3 a 4 días.
Aunque también lo puedes congelar, solo recuerda colocar la fecha de almacenamiento sobre el recipiente (que debe ser resistente al freezer), y de esa forma, el jamón enlatado estará 1 o 2 meses congelado.
Nunca guardes la lata sin abrir dentro del freezer.
¿Cómo saber si el jamón se puso malo?
Una forma de saber si el jamón que tienes guardado ya se echó a perder es mediante su olor, así que cuando empiece a oler raro o fétido es hora de desecharlo.
Tampoco te conviene comer jamón cuando le aparecen manchas verdes o negras, ya que indican que desarrolló moho y está demasiado contaminado.
En ocasiones, al jamón cocido o curado le puede aparecer una película fina y pegajosa que se denomina limo, esto te indica que pronto el jamón se echará a perder, por lo que consúmelo pronto y antes de hacerlo lávalo para remover el limo.
Si no guardas el jamón correctamente le pueden aparecer unas manchas blancas, mejor conocidas como ácaros o piojillos de jamón. Si este es el caso, no lo consumas ya que es sumamente perjudicial para nuestro organismo.
Por último, si tu jamón se ve bien en apariencia, pero tiene un sabor raro o malo, no lo consumas y deshazte de él, así evitaras alguna intoxicación o malestar estomacal.
¿Por qué se echa a perder el jamón?
El jamón es un tipo de carne, eso lo vuelve un producto altamente perecedero, sin embargo, cuando está curado o cocido puede mantenerse por algo más de tiempo, en especial si se almacena en frío.
Aparte, conviene aclarar que en los jamones cocidos se encuentran presentes los ácidos lácticas, unas bacterias benignas, que hacen escudo contra otras bacterias que si son dañinas. Además, producen el limo que te avisa que el jamón está a punto de echarse a perder.
Cuando el jamón no se conserva correctamente, en especial cuando se deja demasiado tiempo a temperatura ambiente, se acumularán las bacterias que aceleran su descomposición.
Esto sucede particularmente con la pierna de jamón sin curar y que no está cocida. Pero con todo tipo de jamón hay que tener mucho cuidado con los patógenos E. coli, la Salmonella, y los ácaros del jamón
¿Cuánto dura el jamón?
Este depende mucho del tipo de jamón y del método de almacenamiento, pero te pondré un resumen de su tiempo de conservación.
Producto
Duración
Jamón crudo (pernil o pierna de cerdo) refrigerado
3 días
Jamón (pernil o pierna de cerdo) sin curar, pero cocinado y refrigerado
3 – 5 días
Jamón crudo (pernil o pierna de cerdo) congelado
6 meses
Jamón cocido sellado y refrigerado
Hasta la fecha de caducidad
Jamón cocido (entero) refrigerado
7 días
Jamón cocido picado refrigerado
3 – 5 días
Jamón cocido en lonjas refrigerado
3 – 4 días
Jamón cocido congelado
1 – 2 meses
Jamón curado y sellado a temperatura ambiente
1 año
Jamón curado, sellado y refrigerado
12 – 18 meses
Jamón curado picado y refrigerado
5 – 7 días
Jamón curado (entero o trozos) congelado
3 – 4 meses
Jamón curado (rebanadas o lonjas) congelado
1 mes
Jamón curado descongelado y refrigerado
4 días
Jamón enlatado sin abrir
Hasta la fecha de caducidad
Jamón enlatado abierto y refrigerado
3 – 4 días
Jamón enlatado abierto y congelado
1 – 2 meses
¿Cuál es el mejor modo de conservar el jamón?
Cuando hablamos de jamón que no está cocido o curado, el mejor método de conservación consiste en congelarlo, pues así se mantendrá durante bastante tiempo.
Lo mismo se podría decir con el jamón cocido, el que viene en grandes bloques sellados al vacío y sin hueso, la mejor manera de conservarlo es dentro del freezer.
Sin embargo, si lo vas a consumir a lo largo de la semana, lo mejor es guardarlo en la nevera, particularmente cuando está en rebanadas o lonchas finas.
Algunos jamones curados pueden estar a temperatura ambiente siempre y cuando se mantenga sellado y el proveedor no indique lo contrario. Aunque resulta más seguro guardarlo dentro de la nevera.
Los jamones enlatados pueden mantenerse durante mucho tiempo siempre y cuando permanezcan sellados, después que se destapen durarán lo mismo que cualquier otro jamón cocido.
Algunas latas de jamón sin abrir se mantendrán bien a temperatura ambiente, pero otros el propio fabricante indicará que se debe conservar dentro de la heladera.
Para conocer los métodos de conservación de cualquier otro producto, solo tienes que dirigirte a nuestro buscador y colocar el alimento que quieras saber cómo almacenar. Contamos con la lista más completa de temas relacionados a la conservación diferentes comidas o productos.
La zanahoria es uno de los vegetales que más consumimos, puede porque su color nos haga parecer que no estamos comiendo una “verdura” como tal, aunque aporta varias vitaminas y minerales al organismo, pero, ¿como se conserva la zanahoria?
Te recomiendo que almacenes las zanahorias crudas en la nevera por 2 o 3 semanas, si están peladas y cortadas puedes guardarlas en agua de 1 a 2 semanas, y si las congelas se mantendrán de 10 a 12 meses.
Para conocer mejor la manera de conservar zanahorias, sigue leyendo.
Como conservar zanahorias en el refrigerador
Esta es la forma más sencilla de guardar las zanahoriasen la nevera:
Paso 1: Limpiar la zanahoria.
Algunas zanahorias pueden venir cubierta con algo de tierra, así que con un papel o trapo de cocina limpia las zanahorias. Es importante que tanto el papel como el trapo estén secos.
Las zanahorias no se deben lavar ya que la humedad haría que se pudrieran más rápido, y no es la idea. Retira también el tallo verde que podrían tener las zanahorias, aunque generalmente ya vienen sin este ramo.
Paso 2: Envolver o poner la zanahoria dentro de una bolsa de papel.
Para evitar que la humedad afecte las zanahorias mientras están almacenadas, envuélvelas con papel absorbente o de periódico. También te sirve una bolsa de papel.
Paso 3: Poner las zanahorias dentro de un recipiente hermético.
Después pon las zanahorias envueltas dentro de un recipiente o bolsa hermética. De esta manera se evita que absorban el olor de otros alimentos.
Paso 4: Etiquetar.
Escribe la fecha de almacenamiento de las zanahorias en una etiqueta y pégala sobre el recipiente, o anota esa información directamente sobre la bolsa.
Paso 5: Guardar las zanahorias en la heladera.
Pon la caja o bolsa con zanahorias en la parte más fresca de tu refrigerador, lejos de alimentos que desprendan gas etileno, como las manzanas o el plátano, de este modo las zanahorias se mantendrán en buen estado de 2 a 3 semanas. [1]
Si no le pones papel las zanahorias te podrían durar de 1 a 2 semanas, y si las guardas directamente en el cajón de las verduras (es decir, sin un recipiente hermético) durarán una semana.
Como congelar zanahorias
¿Se puede congelar la zanahoria? Sí, la zanahoria se puede congelar, pero no cruda, por lo que si tienes demasiadas zanahorias y no quieres desperdiciarlas, tendrás que blanquearlas primero.
Paso 1: Lavar las zanahorias.
Lava las zanahorias con abundante agua, puedes frotarla con un cepillo o trapo de cocina limpio una vez que esté humedecida, para que luego la pongas debajo del chorro del grifo.
Paso 2: Pelar y picar.
Usa un pelador de alimentos para removerles la piel de las zanahorias mucho más fácil, luego pícalas de la forma que quieras: rodajas, cuadros o bastones.
Paso 3: Blanquear las zanahorias.
Pon a hervir los trozos de zanahorias de 3 a 5 minutos.
Paso 4: Colar y detener la cocción.
Transcurrido el tiempo indicado, cuela las zanahorias e inmediatamente después sumérgelas en agua fría, si tiene hielo mejor, para detener la cocción.
Paso 5: Secar.
Pasado dos minutos, cuela nuevamente las zanahorias, y déjalas secar un rato a temperatura ambiente, o ponlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de humedad más rápido.
Paso 6: Realizar primer congelamiento.
Sobre una bandeja con papel pergamino o lámina antiadherente, esparce la zanahoria picada, trata de no amontonarlas mucho, tienen que quedar lo más planas posible.
Luego mete la bandeja al freezer por unas 4 horas o hasta que se congelen completamente.
Paso 7: Transferir los trozos de zanahoria congelada a una bolsa.
Puedes dividir las zanahorias en varias bolsas para congelar con cierre hermético. Aunque como tuvieron un primer congelamiento será fácil sacar después las demás porciones, en caso de que solo tengas una bolsa grande.
Paso 8: Etiquetar.
Anota el nombre del vegetal a congelar, en este caso la zanahoria, con la fecha de almacenamiento sobre la bolsa.
Paso 9: Guardar las zanahorias en el freezer.
De este modo, las zanahorias podrán estar congeladas de 10 a 12 meses. No es necesario descongelar las zanahorias, ya que puedes cocinarlas directamente. [2]
Pero en caso de que quieras descongelarlas, puedes pasar las zanahorias congeladas a la nevera un día antes de usarla, o poner la bolsa en agua fría a temperatura ambiente por una hora.
Conservar zanahorias en agua
En caso de que hayas pelado más zanahorias de las que necesitabas, así estén enteras o picadas, y quieres evitar que se sequen o compraste zanahorias con algunos cortes, puedes almacenarlas en agua del siguiente modo:
Paso 1: Lavar las zanahorias.
Una vez que las zanahorias estén peladas (y/o picadas) lávalas con abundante agua.
Paso 2: Poner en un recipiente y echar agua.
Usa un recipiente hermético de plástico o vidrio, mete primero las zanahorias y luego cúbrelas con agua fría. Luego debes cerrar bien el envase.
Paso 3: Etiquetar.
Pon una etiqueta con la fecha de almacenamiento de la zanahoria sobre el envase.
Paso 4: Guardar el envase con zanahoria en la nevera.
Guarda el envase en la parte más fría de tu heladera, de esta manera, las zanahorias en agua podrán mantenerse en buen estado de 2 a 3 semanas dentro de la nevera.
Eso sí, es importante que cambies el agua cada 24 o 48 horas, para evitar que prolifere el crecimiento bacteriano, y siempre usar agua fría para beber (potable o mineral).
Conservar zanahorias cocidas o picadas
Las zanahorias cocidas puedes congelarlas o refrigerarlas, solo ponlas dentro de un recipiente o bolsa, pero en cualquier caso tienen que ser herméticos y si vas a congelarlas tienen que ser capaces de resistir el freezer.
En la nevera las zanahorias cocidas durarán solo 2 o 3 días, mientras que congeladas llegarán a durar de 6 a 8 meses (duran menos tiempo porque fueron cocidas completamente y tendrán una consistencia más blanda).
En el caso de las zanahorias picadas crudas, puedes guardarlas en agua como se explicó en el punto anterior, o envolver los trozos de zanahoria en papel húmedo y después ponerla en un recipiente hermético.
De esta forma, las zanahorias picadas en la parte más fría de la nevera podrían llegar a durar unos 5 o 7 días.
Y en caso de que quieras saber cuanto dura la zanahoria rallada en la heladera, pues dura menos tiempo, de 2 a 3 días, si está envuelta en un papel húmedo dentro de una bolsa o recipiente hermético, o 24 horas sin el papel en los mismos recipientes.
Como mantener las zanahorias en escabeche
Otra forma que tienes para aprovechar las zanahorias es preparar un escabeche, de este modo preservas por más tiempo las zanahorias peladas y picadas, además de que puedes potenciar y/o añadirle sabor.
Hay muchas recetas para un escabeche con las zanahorias, pero para una de las más básicas solo necesitarás: 3/4 taza de vinagre (puedes ser blanco o de manzana), 1/2 taza de agua, 1 cucharada de azúcar y 1/2 cucharadita sal.
Para la preparación tienes que:
Paso 1: Esterilizar los tarros.
Para guardar las zanahorias en escabeche requieres de tarros de vidrio de tamaño medio o grande que tengan tapa hermética o de rosca.
Para esterilizarlo, pon los tarros y las tapas en una olla con agua hirviendo durante 15 minutos. Luego sácalos con unas pinzas y colócalos sobre una rejilla para que se escurran y sequen.
Paso 2: Quitar la piel a las zanahorias y lavarlas.
Pela las zanahorias y después lávalas con abundante agua.
Paso 3: Picar las zanahorias.
Corta la zanahorias de la forma en que prefieras, como en rodajas, juliana, puedes dividirla en cuatro o incluso rayarla.
Paso 4: Preparar la mezcla.
En una olla echa el vinagre, el agua, el azúcar y la sal, lleva al fuego hasta que hierva.
Paso 5: Llenar los tarros.
Cuando los tarros estén completamente secos, añade las especies que quieras primero (como la pimienta o el tomillo, e incluso puedes añadir cabeza de ajos o cebollas), después añade las zanahorias y finalmente cúbrelo con la mezcla que preparaste antes.
Cubre por completo las zanahorias, dejando 1 ½ centímetro libre.
Paso 6: Sellar los tarros al vacío.
Aunque no es necesario, puedes realizar el vaciado para alargar la duración de las zanahorias en escabeche. Para ello, prepara una olla grande con tapa, ponle un trapo al fondo.
Encima de este trapo coloca los tarros de tal modo que evite que se choquen entre ellos o con el fondo de la olla constantemente. Luego añade agua hasta cubrirlos y enciende el fuego.
Hierve durante 20 o 30 minutos para se efectúe el vaciado. Si tienes una olla de presión bastará con unos 15 o 20 minutos a fuego medio bajo. Pasado este tiempo, apaga el fuego y deja que el agua se temple antes de sacar los frascos.
Paso 7: Sacar los tarros del agua.
Saca los tarros cuando el agua no esté tan caliente con unas pinzas y colócalos sobre una mesa o encimera donde no le pegue la luz del sol, hasta que se enfríen por completo. Esto puede tardar entre 6 y 10 horas.
Paso 8: Etiquetar.
Una vez que los tarros estén completamente fríos y secos, pégale una etiqueta con la fecha de preparación del escabeche.
Paso 9: Guardar la zanahoria en escabeche.
Puedes dejar el tarro sin abrir de zanahoria en escabeche a temperatura ambiente por unos 6 meses, una vez que destapes los tarros deberás mantenerlo refrigerado de 3 a 4 semanas.
La zanahoria en escabeche sellada puede llegar a durar en la heladera hasta un año. Y en caso de que no hayas sellado al vacío los frascos, podrás mantenerlos en la nevera de 3 a 4 semanas.
Cómo deshidratar zanahorias
Una manera de aprovechar una gran cantidad de zanahorias para que no se pierdan y te duren mucho tiempo, consiste en deshidratarlas. Solo tienes que:
Paso 1: Quitar la piel a las zanahorias y lavarlas.
Quítale la piel a la zanahorias y luego lávalas con abundante agua.
Paso 2: Cortar las zanahorias.
Puedes picarla de la forma que quieras: rodajas circulares o alargadas, cortarla en cuadros e incluso puedes rallarla.
Paso 3: Blanquear las zanahorias.
Pon los trozos de zanahoria en una olla con agua caliente y hierve durante 2 minutos. Transcurrido este tiempo, corta la cocción, para ello cuela las zanahorias e inmediatamente después échalas en un bol con agua fría (si tiene hielo mejor).
Vuélvelas a colar y déjalas un rato en el colador para que se sequen.
Paso 4: Preparar una bandeja.
Si piensas usar un horno, prepara una bandeja con papel pergamino o una lámina antiadherente, aunque también podrías poner una rejilla fina o malla sobre la bandeja, y extiende los trozos de tal manera que no se toquen entre ellos (a menos que hayas rallado la zanahoria).
Si usarás un deshidratador de alimentos, extiende las rodajas de zanahorias por toda la rejilla interna dejando espacio entre ellas.
Paso 5: Deshidratar.
En el caso de que uses un horno ponlo a la temperatura más baja que te permite tu equipo, este puede ser unos 60° o 70°C, mete la bandeja y hornea por 6 u 8 horas, las zanahorias ralladas se secaran más rápido así que conviene estar pendiente.
Si usaste un deshidratador de alimentos ajusta la temperatura a 52°C y seca por aproximadamente unas 8 u 12 horas, dependiendo del grosor.
Las zanahorias estarán deshidratadas cuando estén duras y algo quebradizas. Déjalas unos minutos al aire libre para que se enfríen antes de guardarlas.
Paso 6: Poner la zanahoria deshidratada en envases herméticos.
Puedes utilizar un recipiente hermético hecho de plástico, pero sería mejor si usas un tarro de vidrio ya que deberán estar almacenadas durante bastante tiempo y ahí se mantendrán mejor.
Paso 7: Guardar las zanahorias deshidratadas.
Puedes guardar el frasco con zanahorias deshidratadas en un lugar seco, oscuro y libre de humedad por todo un año.
También puedes guardar la zanahoria deshidratada en el freezer, solo tendrás que pasarla a una bolsa para congelar que sea hermética, de 18 a 24 meses.
Para rehidratarla y usarla en sopas y salsas, remoja la zanahoria deshidratada en agua caliente durante 15 minutos.
Conservar la zanahoria enlatada
La zanahoria también la puedes comprar enlatada, por lo general picada en cuadros, y/o combinadas con guisantes o alguna otra verdura. De igual forma, las latas de zanahorias son un producto fácil de almacenar.
Si no la has destapado, guárdalas en un lugar fresco, pero que esté oscuro y preferiblemente seco, como en un compartimiento de tu despensa. De este modo, la zanahoria enlatada llegará a durar hasta la fecha de vencimiento.
Sin embargo, los productos enlatados suelen tener una vida útil mucho más larga que la indicada por el fabricante. Una vez que la hayas destapado y te haya sobrado un poco puedes ponerla dentro de un recipiente hermético.
En la nevera, la zanahoria enlatada te llegará a durar unas 3 o 4 días, mientras que congelada de unos 6 a 8 meses. Pero en este último caso te conviene ponerla dentro de una bolsa hermética o un recipiente resistente al freezer.
Conservar la bolsa de zanahoria congelada
En los supermercados o tiendas puedes adquirir las bolsas de zanahorias congeladas, y al igual que la versión enlatada, mayormente se suelen conseguir mezclada con otros vegetales, pero también vienen solo zanahorias o zanahorias bebés.
Y por el hecho de venir en una bolsa, hay que tener mayor cuidado con ella. Por lo tanto, intenta no romper la cadena frío, así que sácala del área de congelados cuando te falte poco para pagar, y métela en una bolsa térmica o en una de plástico pero bien amarrada.
Y al llegar a casa, guárdala directamente en el freezer. Si no la has abierta, la bolsa de zanahoria congeladas se mantendrá hasta la fecha de vencimiento señalada por el fabricante.
Una vez que destapes la bolsa de zanahorias congeladas, deberás ponerla dentro de otra bolsa para congelar hermética, de esta manera se mantendrá aproximadamente unos 8 o 12 mesesen el freezer.
Si decides guardarlo en la nevera te llegará a durar 3 o 4 días. Pero en este caso no te recomiendo que la refrigeres porque podrían perder consistencia.
Cómo conservar el jugo de zanahoria
Si preparaste jugo de zanahoria y no te lo bebiste todo, puedes dejarlo tranquilamente en la nevera por unas 48 horas, en un recipiente con tapa. Pero te aconsejo que le agregues dos cucharas de jugo de limón o lima.
El ácido cítrico no solo evitará que el jugo se oxide, sino que además evitará que crezcan bacterias dañinas a corto plazo.
También puedes congelar el jugo de zanahoria para extender un poco más su tiempo de vida útil, sin embargo, no te aconsejo que lo hagas porque se perderán muchos de los nutrientes naturales del jugo.
Pero en caso de no querer desperdiciar el jugo de zanahoria y tienes la certeza de que no lo tomaras pronto puedes hacer lo siguiente:
Paso 1: Verter el jugo en una bolsa hermética o en un molde para cubos de hielo.
Vierte el jugo en una bolsa hermética pero sin llenarla completamente, ya que al congelar el jugo se expande. También puedes verterlo en un molde para cubos de hielo, o directamente en un recipiente hermético apto para congelar (acá tampoco conviene llenarlo por completo).
Paso 2: Realizar primer congelamiento.
Pon las bolsas con jugo sobre una bandeja e intenta mantenerla aplanada para que se congele rápido. Si usaste el molde de cubo de hielo solo mételo en el freezer. En caso de haber usado un recipiente hermético, salta este paso.
Paso 3: Embolsar el jugo congelado.
Una vez que los cubos estén congelados, desmóldalos y pásalos a una bolsa para congelar hermética. Si usaste varias bolsas, puedes ponerlas todas en otra bolsa más grande.
Paso 4: Etiquetar el contenedor.
Anota la fecha de almacenamiento del jugo sobre la bolsa, o pega una etiqueta en el recipiente.
Paso 5: Guardar el jugo de zanahoria en el freezer.
Así el jugo podrá estar congelado unos 6 meses, pero cuanto más tiempo pase, irá perdiendo sabor. Además es normal que el agua y la zanahoria se separen cuando se congele, por lo que cuando lo vayas a descongelar, pásalo un día antes a la nevera y vuélvelo a licuar antes de tomarlo.
¿Cómo saber si las zanahorias están malas?
Sabrás cuando las zanahorias se encuentren en mal estado por su aspecto, así que cuando veas que tenga manchas o pelusas negras, verdes o blancas sobre su piel del camote, quiere decir que desarrollaron moho, y ya no se deben comer porque te podrías enfermar.
También es mala señal si al tacto están aguadas, o tiene zonas donde tu dedo se hunde fácilmente, esto es porque ya está podrida. Sabrás que le falta poco para podrirse cuando la zanahoria se vuelva más moldeable y se pueda doblar fácilmente, perdieron la dureza que tiene cuando están frescas.
Si desprende olor a podrido o raro definitivamente se echaron a perder. Igualmente si su sabor cambió, así que si la zanahoria sabe mala o rara no la comas y bótala a la basura para que no corras el riesgo de intoxicarte.
¿Cuánto duran las zanahorias?
Las zanahorias puedes durar bastante si las mantienes en frío, acá te dejaré un resumen de su tiempo de vida útil.
Producto
Duración
Zanahorias refrigeradas (envueltas en papel y dentro de recipiente hermético)
2 – 3 semanas
Zanahorias refrigeradas (dentro de recipiente hermético)
Zanahoria rallada envuelta en papel húmedo y refrigerada
2 – 3 días
Zanahoria rallada refrigerada
24 horas
Zanahoria en escabeche sellada a temperatura ambiente
6 meses
Zanahoria en escabeche sellada y refrigerada
1 año
Zanahoria en escabeche destapada o sin sellar refrigerada
3 – 4 semanas
Zanahoria deshidratada a temperatura ambiente
1 año
Zanahoria deshidratada y congelada
18 – 24 meses
Zanahoria enlatada sellada
Hasta la fecha de vencimiento
Zanahoria enlatada abierta y refrigerada
3 – 4 días
Zanahoria enlatada abierta y congelada
6 – 8 meses
Bolsa de zanahoria congelada sin abrir
Hasta la fecha de vencimiento
Bolsa de zanahoria congelada abierta
8 – 12 meses
Bolsa de zanahoria congelada, en la nevera
3 – 4 días
Jugo de zanahoria refrigerado
48 horas
Jugo de zanahoria congelado
6 meses
¿Por qué se dañan las zanahorias?
Como la mayoría de las verduras y hortalizas, las zanahorias al ser un producto natural que contiene azúcar natural y fructosa suelen ser el objetivo principal de microorganismos, insectos y otras alimañas que buscan alimentarse de ellas, contaminándola y dañándola.
La humedad es otro enemigo de las zanahorias, este agente externo acelera su proceso natural de descomposición, y propicia la aparición de hongos y bacterias.
Asimismo, al ser un producto natural, el proceso de maduración no se detiene una vez que se cosechen, por ende seguirá produciéndose hasta pudrir por completo este vegetal.
¿Cuál es la mejor manera de conservar las zanahorias?
Con total seguridad se puede decir que la zanahoria cruda se preserva muy bien dentro de la nevera, ya que ahí puede mantener su frescura durante semanas. Asimismo, una vez que este cocida puede durar unos días, sin perder sabor o consistencia en la heladera.
Entretanto, cuando las congelas se corre el riesgo de que el sabor se vea afectado, aunque se extiende mucho más su tiempo de vida útil. Además, puedes aprovechar las zanahorias para hacer un escabeche que no solo le añade sabor, también le mantiene por más tiempo.
Si deshidratas la zanahoria podría durante una buena temporada a temperatura ambiente, sin correr el riesgo de que se echen a perder.
La zanahoria que adquiriste enlatada o congelada también te puede llegar a durar mucho tiempo si la almacenas adecuadamente.
Si quieres conocer cómo guardar algún otro producto, en este sitio podrás encontrar un montón de temas relacionados con la preservación de alimentos.
El guacamole es una salsa de origen mexicano que se ha vuelto muy popular en todo el mundo. Se prepara con aguacate, chile o pimiento, cebolla, cilantro y, en algunos casos, tomates, pero, ¿cómo se conserva el guacamole?
El guacamole lo puedes guardar en la nevera de 3 o 4 días, también lo puedes congelar, aunque se recomienda hacerlo únicamente con el puré de aguacate por 3 o 4 meses, sin el resto de ingredientes.
Si te interesa saber cómo conservar guacamole del modo correcto, solo sigue con la lectura.
Cómo conservar el guacamole en la nevera
Pues bien, como el guacamole se compone mayormente de aguacate, lo ideal sería comer toda la salsa el mismo día, ya que la pulpa de este fruto se oxida muy rápido, es decir, se torna marrón, aunque esto no necesariamente indique que se haya echado a perder, hace que la salsa no resulte agradable a la vista.
Esta oxidación ocurre cuando la pulpa del aguacate entra en contacto con el oxígeno, de modo que, para conservar el guacamole, hay que mantenerlo aislado, evitar que esté expuesto al aire mucho tiempo, algo sumamente difícil de lograr, pero no imposible.
Solo necesitas seguir estas indicaciones para preservar el guacamole en la heladera con éxito:
Paso 1: Pasar el guacamole a un recipiente hermético.
Aplana bien el aguacate dentro del recipiente de modo que quede una superficie lisa. También podrías colocar el guacamole en una bolsa, pero únicamente si puedes sellarla al vacío, de lo contrario lo mejor será utilizar un recipiente hermético.
Paso 2: Verter agua sobre el guacamole.
Así es, si viertes agua sobre el guacamole, se creará una capa de protección que evitará que el aire entre en contacto con la salsa. Para ello, debes verter el agua con sumo cuidado, puedes usar una cuchara al revés, así el chorro no caerá directamente en el guacamole.
También podrías aplicar una capa de vinagre, jugo de limón y aceite (preferiblemente de oliva), pero estos líquidos alterarán el sabor del guacamole, así que ten en mente eso.
No te recomiendo cubrir el guacamole con crema agria o con simplemente una capa de film plástico, ya que se ha comprobado que el aguacate igual se oxida, y eso es lo que se quiere evitar.
Paso 3: Guardar el guacamole en la nevera.
Antes de cerrar el recipiente con el guacamole, pon encima una capa de papel film, también podrías envolver el recipiente con este film transparente una vez que esté tapado, de este modo, reduces las posibilidades de que entre aire.
Después, coloca el recipiente en la parte más fría de la heladera, de esta manera, el guacamole podrá mantenerse refrigerado durante 3 o 4 días. [1]
Antes de volver a utilizar el guacamole, solo tienes que escurrir el agua, no te preocupes si ya no está clara, es normal en este caso.
Cómo congelar el guacamole
¿Se puede congelar el guacamole? Sí puedes hacerlo, no obstante, te aconsejó solo congelar el puré de aguacate, puesto que el resto de ingredientes podrían sufrir alteraciones en el freezer que los volverá desagradable al paladar.
Para preservar el guacamole en el freezer, tendrás que hacer lo que te indico a continuación:
Paso 1: Pasar el guacamole a una bolsa hermética.
Puedes usar un vaso para ayudarte a rellenar la bolsa, la idea es que después, aplanes el puré de aguacate o guacamole.
Un consejo de mucha utilidad, en caso de que hayas preparado mucho puré de aguacate o guacamole, es que lo separes en porciones más pequeñas, es decir, que lo pongas en varias bolsas de menor tamaño, así solo descongelarás las porciones que vayas a necesitar luego, ya que el guacamole no se puede volver a congelar.
Recuerda sacar todo el aire de la bolsa antes de sellar la bolsa. También podrías hacer uso de un recipiente que pueda resistir el freezer, pero primero cubre las paredes internas con aceite, para que el guacamole no se adhiera al recipiente y no uses frascos de vidrio o podrían estallar en el congelador.
Paso 2: Realizar el primer congelamiento del guacamole.
Lo ideal sería que el puré de aguacate o guacamole se congele rápidamente, para ello acomoda las porciones sobre una bandeja y métela al freezer durante 4 o 6 horas.
Paso 3: Embolsar las porciones de guacamole.
Cuando las porciones de puré de aguacate o guacamole estén completamente congeladas, ponlas en otra bolsa más grande, así evitarás que sufran quemaduras por congelamiento.
Paso 4: Escribir la fecha de preparación del guacamole.
Coloca la fecha del día que preparaste el guacamole o realizaste el puré de aguacate, sobre la bolsa donde la guardaste, o pégale una etiqueta con la fecha al recipiente.
Paso 5: Guardar el guacamole en el freezer.
Si a pesar de las advertenciascongelaste el guacamole, llegará a durar 1 o 2 meses. En cambio, el puré de guacamole podrá estar entre 3 o 4 meses congelado. [2]
Cómo descongelar guacamole
Una vez que ya hemos podido conservar guacamole congelándolo, es importante saber cómo descongelar guacamole, y para ello te mostramos a continuación 3 tips que te ayudarán en el proceso de descongelación.
Tip 1: Guacamole con anticipación
La mejor manera de descongelar guacamole es moverlo del congelador al refrigerador 24 horas antes de que lo necesite, o al menos la noche anterior.
Tip 2: Guacamole ahora mismo
Si no tienes tiempo para esperar 24 horas para que se descongele el guacamole, puedes poner el guacamole congelado en un recipiente con agua fría durante 30-40 minutos hasta que se ablande. Recuerde, nunca deje que alcance la temperatura ambiente o se caliente para la seguridad alimentaria.
Tip 3: Mantén tu almuerzo frío
Usar el guacamole congelado con tu almuerzo no es una mala idea para mantenerlo fresco. Es una buena idea como complemento en una ensalada o una faja o wrap de pollo.
Hemos llegado al final de este artículo sobre conservar guacamole. Cuéntanos que te ha parecido y si podemos ayudarte en algo más, de momento te dejamos con otro contenido que te puede ser igual o más valioso aún.
¿Cómo saber si el guacamole se puso malo?
Cuando el guacamole empiece a oler mal, es porque definitivamente se echó a perder y deberás tirarlo. También si el guacamole tiene un sabor extraño, no lo comas y descártalo.
Si a tu guacamole le salieron unas pelusas o manchas negras o blancas, desarrolló moho, y esto quiere decir que se ha contaminado completamentey debes deshacerte de toda la salsa, aunque solo le haya salido en una pequeña zona.
En caso de que el guacamole tenga un aspecto raro, bien sea que se haya puesto muy marrón o esté muy aguado, verifica su olor y sabor antes de tirarlo.
¿Cuánto dura el guacamole?
Lamentablemente, el guacamole no es una salsa con una vida muy extensa, de igual modo, te dejaré un resumen de ello acá abajo.
Producto
Duración
Guacamole refrigerado
3 – 4 días
Guacamole congelado
1 – 2 meses
Puré de aguacate congelado
3 – 4 meses
Guacamole o puré de aguacate descongelado y refrigerado
1 – 2 días
¿Cuál es la mejor forma de conservar el guacamole?
Teniendo en cuenta que el guacamole puede cambiar de textura y/o sabor dependiendo del modo en cómo fue almacenado, considero que la mejor manera de conservar guacamole, consiste en guardarlo en la nevera, dentro un recipiente hermético con una capa de agua encima.
Si almacenas el guacamole con una capa de jugo de limón, aceite o vinagre su sabor se alterará. Sin embargo, si refrigeras el guacamole que fue sellado al vacío, podrá mantenerse tan bien como si tuviera una capa de agua.
Aunque no es aconsejable congelar el guacamole, debido a que el resto de ingredientes cambia considerablemente su textura al descongelarse, pero si no te importa eso, podrá durar un par de meses.
Pero es mejor congelar el puré de aguacate en el freezer y completar la salsa después que la hayas descongelado, así tendrás un guacamole prácticamente fresco cada vez que quieras.
Para saber cómo conservar alguna otra salsa o platillo, puedes verificar si tenemos ese tema publicado en nuestro portal, ya que contamos con una amplia variedad de temas sobre la preservación de productos. Además, regularmente añadimos nueva información y realizamos actualizaciones.