Cómo Conservar el Polen de Abeja

Conservar el Polen de Abeja
Conservar el Polen de Abeja

Se habla mucho de los beneficios del polen de abeja en internet, pero es algo que no voy a analizar. Pero mi tema de interés, y quizás el tuyo también, es cómo conservar el polen de abeja.

Para conservar el polen de abeja fresco, puede almacenarlo a temperatura ambiente hasta por seis meses. Además, séquelo para extender su vida útil durante un año. Y si has comprado polen industrial, debes guardarlo en la despensa.

Sigue leyendo para que aprendas todas las formas para conservar polen de abeja.

Cómo conservar el polen de abeja fresco

El polen de abeja fresco es muy sensible a la humedad por lo que debes conservarlo en la despensa, no en la nevera. A continuación te mostramos los pasos y consejos para que te dure por largo tiempo y evitar problemas de descomposición.

  • Paso 1. Busca envases de vidrio

Debes buscar varios envases de vidrio de tamaño pequeño para distribuir el polen de abeja.  Este es un consejo esencial para mantener el polen fresco por más tiempo.

  • Paso 2. Coloca el polen de abeja en envases de vidrio

Cuando tengas los envases limpios y secos añade el polen de abeja fresco en cada uno y al final los cierras herméticamente.

  • Paso 3. Almacena en la despensa

Recuerda el polen de abeja fresco es sensible a los cambios de temperatura y humedad porque lo estropea muy rápido. Así que el lugar donde coloques los envases debe estar seco y sin humedad. Asimismo asegúrate de que haya buena ventilación esto evitara que contraiga moho o bacterias.

Al conservar polen de abeja fresco en la despensa en envases de vidrio puede permanecer intacto durante 4-6 meses.

Cómo congelar polen de abeja fresco

¿Se puede congelar polen de abeja fresco? Si, pero no para nada recomendable hacer debido a que va a cambiar las propiedades el polen drásticamente, y además, no va a aumentar su vida útil, sino que por el contrario, la disminuye.

Aun así, si quieres congelar el polen de abeja, te dejo las indicaciones.

  • Paso 1. Coloca el polen en un envase de plástico

Añade el polen de abeja fresco en un envase de plástico y tapa herméticamente.

  • Paso 2. Etiqueta el envase

Es importante que coloques la fecha de almacenamiento en tu envase para que sepas desde cuando lo tienes en tu refrigerador guardado.

  • Paso 3. Lleva al congelador

Coloca tu envase con el polen de abeja fresco dentro del congelador. Debes evitar colocarle otros productos pesados encima y que este alejado de carnes o pescado para que no absorba sus olores.

Congelar el polen de abeja fresco hará que tu producto se conserve durante 2 meses.

Cómo secar polen de abeja fresco en el deshidratador

El método de secado permite eliminar la humedad presente en diferentes alimentos, por lo que es una forma de conservación efectiva a largo plazo. En el caso del polen de abeja fresco se puede secar ya que remueve la humedad que tiene que es aproximadamente del 30-40%.

Esto trae muchos efectos positivos en el polen de abeja como son preservación de sus propiedades físicas y químicas. Además que lo protege del moho o bacterias al momento de conservarlo.

Veamos los pasos para secar polen de abeja en casa utilizando el deshidratador. Toma notas.

  • Paso 1. Caliente el deshidratador

Enciende tu deshidratador y colócalo en la temperatura más baja para que se caliente por unos 10 minutos.

  • Paso 2. Coloca papel encerado en la bandeja

El papel encerado hará que los granos del polen no se caigan de la bandeja.

  • Paso 3. Coloca el polen de abeja en las bandejas del deshidratador

Añade el polen de abeja fresco en la bandeja del deshidratador.

  • Paso 4. Seca

Debes secar durante 10 horas a una temperatura de 30°C.

  • Paso 5. Retira y deja enfriar

Una vez que veas que los granos de polen se han secado debes retirar y dejar enfriar.

  • Paso 6. Guarda en un recipiente hermetico

Busca un envase de vidrio y añade el polen de abeja deshidratado. Por último cierra herméticamente.

  • Paso 7. Etiqueta

Coloca una etiqueta con la fecha de almacenamiento.

  • Paso 8. Almacena en la despensa

Introduce el envase en la despensa o alacena, asegurándose que esté completamente sin humedad y con buena ventilación.  El polen de abeja deshidratado puede durar en tu despensa durante 1 año.

Cómo conservar polen de abeja industrial

En muchos supermercados o tiendas naturistas venden polen de abeja procesado por lo que si compras este producto es importante saber los pasos para conservarlo. A continuación te mostramos los pasos y consejos útiles para conservar polen de abeja industrial.

  • Paso 1. Deja el polen de abeja en su envase original

Una clave es que no cambies el polen de abeja de su envase original, ya que este es apto para mantenerlo alejado de la humedad.

  • Paso 2. Busca un  lugar en tu despensa

El lugar que escojas debe estar completamente seco y sin rastro de humedad porque puede dañar rápidamente el polen de abeja. Además, alejado del calor así que no lo coloques cerca de la estufa, horno microondas u otro electrodoméstico que genere calor.

  • Paso 3. Almacena en la despensa

Ya tienes el lugar listo en tu despensa es momento de colocar el envase de polen de abeja dentro. Asegúrate de que no esté cerca de alimentos que tengan olores fuertes.

Con esta forma de conservar polen de abeja puede permanecer intacto hasta por 6 meses o según este reflejado en su fecha de caducidad.

Consejo adicional:

Cuando lo vayas a utilizar es importante que saques el polen que necesites con una cuchara de plástico que este seca y limpia. Luego, vuelve a cerrar el envase muy bien, esto evitara que se contamine o dañe.

¿Cómo saber si el polen de abeja está malo?

Uno de los problemas que afecta directamente al polen de abeja es la humedad, es su enemigo primordial y hace que se dañe rápidamente. Entonces, ¿Cómo saber cuando el polen de abeja esta estropeado? Te enseñamos algunos signos de descomposición.

  • El color del polen de abeja cambia y se vuelve muy oscuro.
  • El olor de los granos de polen es a rancio.
  • Observas que el polen tiene moho en alguna de sus partes.
  • El sabor del polen por lo general es dulce por lo que si lo pruebas y tiene un sabor agrio o rancio debes desecharlo.

¿Cuánto dura el polen de abeja?

La duración del polen de abeja depende de la forma de conservación que elijas, es por ello que hemos hecho un cuadro con estos datos.

ProductoDuración
Polen de abeja fresco en la despensa4-6 meses.
Polen de abeja fresco congelado2 meses.
Polen de abeja fresco deshidratado1 año.
Polen de abeja industrial en la despensa6 meses.

¿Cuál es la mejor forma de conservar polen de abeja?

La mejor manera de conservar el polen de abeja fresco o industrial es a temperatura ambiente en la despensa o alacena, y la vida útil varía de cuatro a seis meses.

El principal enemigo del polen de abeja es la humedad, por lo que la nevera o el congelador representan malas opciones de almacenamiento y no alargarán su vida útil.

Suponga que tiene una gran cantidad de polen fresco. En ese caso, es recomendable secarlo con un deshidratador para eliminar toda la humedad y así poder conservar este producto durante mucho tiempo sin preocuparte de que se dañe.

Esperamos que te hayan gustado las formas para conservar polen de abeja, cada una es muy fácil de realizar solo sigue al pie de la letra los consejos que te dimos. Si quieres seguir aprendiendo de otros métodos de conservación, navega por otros post y seguro aprenderás mucho de lo que hemos escrito.

Cómo Conservar la Fritura Crocante

Conservar la Fritura Crocante
Conservar la Fritura Crocante

La fritura es un método de cocción que consiste en sumergir la comida en aceite o grasa muy caliente, y por lo general, la mayoría de los alimentos fritos adquieren una consistencia crocante, pero que con el tiempo puede perderse, por eso es muy importante saber cómo se conserva la fritura crocante.

Dependiendo del tipo de fritura, esta se podría mantener 1 o 2 días a temperatura ambiente; unos 3 o 4 días en la nevera; mientras que si se congela, podría llegar a durar entre unos 2 o 6 meses.

Si te interesa conocer algunas recomendaciones para preservar lo mejor posible una fritura crocante, solo tienes que seguir con la lectura.

Para leer las instrucciones de almacenamiento de cada fritura específica que iremos describiendo durante el artículo, hacer clic en los enlaces

Conservar la fritura crocante a temperatura ambiente

Pues bien, no todas las frituras se pueden conservar a temperatura ambiente, sobre todo, cuando son alimentos sumamente perecederos como el pollo, la carne y el pescado.

Por tal motivo, el tipo de fritura crocante que se puede conservar a temperatura ambiente se encuentra hecha en gran medida por algún tipo de harina como las croquetas, las sopaipillas o los churros, con excepción de las arepas fritas que lo mejor es conservarla en la nevera.

Sin embargo, los torreznos,pese a ser carne de cerdo, se ha comprobado que pueden preservarse bien a temperatura ambiente.

Si se cuenta con un calentador de comida, o de un horno con esta funcionalidad, se podría mantener la fritura crocante y caliente entre unas 12 o 24 horas. Una vez transcurrido este tiempo la comida se empezará a descomponerse.

Para aquellos que no tengan este calentador, o simplemente deseen conservar un poco más la fritura, estas son las reglas generales que se deben seguir para preservar las frituras crocantes a temperatura ambiente:

  • Paso 1: Eliminar el exceso de grasa.

Luego de sacar la fritura del aceite, es importante eliminar el excedente para evitar que se ablande y pierda su textura crocante. Para ello, se deben poner sobre una rejilla o papel absorbente.

  • Paso 2: Esperar que enfríe.

Esto es de suma importancia antes de guardar una fritura crocante dentro de un recipiente hermético. Si se almacena aun estando caliente, el vapor se condensaría dentro y ablandaría la fritura, además de que aceleraría el proceso de descomposición.

Por tal motivo, la fritura debe estar sobre la rejilla no solo hasta perder el excedente de grasa, sino hasta que se enfríe totalmente.

  • Paso 3: Colocar papel absorbente en el recipiente.

Antes de poner la fritura dentro del recipiente (que debe ser hermético), hay que colocar papel absorbente al fondo del recipiente, para que cualquier excedente de aceite sea absorbido por este.

También conviene colocar capas de papel encerado o absorbente entre las frituras, en caso de amontonar unas sobre otras.

  • Paso 4: Guardar en un sitio seco.

Es vital poner el recipiente en un lugar libre de humedad, fresco y oscuro. De este modo, la fritura crocante podrá estar a temperatura ambiente por 2 días.

Conservar la fritura crocante en la nevera

Si la fritura es de pollo, carne o pescado, como las milanesas, o de alguna verdura o fruta, como el budín de acelga, no se debe guardar a temperatura ambiente, sino que deben mantenerse refrigeradas.

Aunque no está demás decir que el refrigerador no es el sitio ideal para almacenar todo tipo de frituras crocantes, por el ambiente frío y húmedo de este electrodoméstico.

Por tal motivo, es importante sellar bien la fritura, para impedir el paso de aire. Si sigues estas indicaciones, las frituras crocantes se preservarán bien en la nevera:

  • Paso 1: Esperar que la fritura se enfríe.

Al sacar la fritura del aceite, se debe poner sobre una rejilla para que elimine el exceso de grasa y se enfríen. También se podría colocar sobre papel absorbente, para eliminar el excedente de grasa y luego ponerla sobre la rejilla.

  • Paso 2: Envolver o sellar al vacío.

Algunas frituras al estar hechas o por tener harina, pueden absorber el olor y sabor de otros alimentos, para prevenir que eso suceda, se deberá envolver la fritura con film plástico.

Aunque si se cuenta con una máquina de sellado al vacío resultaría mucho mejor.

  • Paso 3: Poner en un recipiente o bolsa hermética.

La fritura crocante la puedes poner dentro de un recipiente o bolsa hermética para de esta manera reforzar la protección.

  • Paso 4: Almacenar en la heladera.

Finalmente, pon la bolsa o recipiente con las frituras en la heladera. Así, las frituras crocantes podrán estar aproximadamente unos 3 o 4 días refrigeradas[1].

Congelar las frituras crocantes

¿Se pueden congelar las frituras crocantes? Sí, pero no todos las frituras congelan bien. Esto dependerá mucho de los ingredientes que lleve la fritura.

No obstante, aquellas frituras que si se puedan congelar, deben seguir, por norma general, estas recomendaciones:

  • Paso 1: Esperar que la fritura se enfríe.

Al sacar la fritura del aceite, colócala sobre una rejilla o papel absorbente hasta eliminar el exceso de grasa y déjala ahí hasta que enfríe.

  • Paso 2: Envolver o sellar al vacío.

Si tienes una máquina para sellar la fritura al vacío, mucho mejor. En caso de no tener una, debes envolver la fritura crocante con papel film, luego con papel aluminio, o bien doble capa de film plástico.

  • Paso 3: Embolsar.

Pon las frituras dentro de una bolsa, o recipiente hermético, apta para congelar.

  • Paso 4: Etiquetar.

Escribe la fecha de almacenamiento de la fritura. O coloca una etiqueta con la fecha.

  • Paso 5: Guardar en el congelador.

De este modo, la fritura crocante podrá estar congelada entre 2 a 6 meses[2], dependiendo del alimento.

¿Cómo recalentar una fritura crocante?

La manera de recalentar la fritura sumamente importante para preservar su consistencia crujiente. Algunos piensan que volver a freír una fritura hará que vuelva a estar crocante, pero en la mayoría de los casos, ocurre lo contrario, ya que el exceso de aceite hace que la fritura se ablande mucho.

Por lo tanto, siempre es mejor recalentar la fritura dentro de un horno, freidora de aire u hornito eléctrico. De este modo, la fritura quedará crocante y sin exceso de grasa.

En caso de haber estado congelada, en algunas ocasiones conviene pasar la fritura a la nevera para que se descongele lentamente, pero en otras lo mejor es meter la fritura directamente al horno.

Tampoco se recomienda mucho recalentar la fritura en el microondas si no quieres perder su consistencia crujiente.

¿Cómo saber si una fritura se echó a perder?

Si una fritura se puso mala tendrá alguna de estas características:

  • Mal olor: si huele mal, lo más probable es que haya echado a perder y se debe tirar.
  • Mal sabor: si al probar la fritura, esta tiene un sabor rancio o amargo, hay que tirarla inmediatamente a la basura.
  • Moho: si presenta manchas blancas, verdes o negras, implica que desarrolló moho y ya no es apta para el consumo.
  • Cambio de textura: si la fritura se encuentra excesivamente dura, o está muy aguada o viscosa al tacto, lo más probable es que se haya dañado.

¿Cuánto tiempo puede permanecer la fritura crocante almacenada?

Esto dependerá de la forma en cómo se guarde la fritura, abajo pondré el resumen de su tiempo de conservación.

ProductoDuración
Fritura crocante a temperatura ambiente2 días
Fritura crocante refrigerada3 – 4 días
Fritura crocante congelada2 – 6 meses

¿Cuál es la mejor manera de conservar la fritura crocante?

Según el tipo de fritura, en algunos casos conviene guardarlas a temperatura ambiente para preservar su textura crujiente. Otras requieren conservarse en la nevera para no acelerar el proceso de descomposición del alimento.

Para preservar por un largo tiempo la fritura, esta se puede congelar. Pero hay que tener en cuenta, que sin importar como se almacene, la fritura recalentada nunca será igual a una fritura recién hecha.

Por ello, conviene aprender a cómo preservar diferentes alimentos y de distintas formas. Por suerte, este sitio cuenta con una larga lista de temas concernientes a este tipo de información.


[1] https://www.mayoclinic.org/healthy-lifestyle/nutrition-and-healthy-eating/expert-answers/food-safety/faq-20058500#:~:text=Answer%20From%20Katherine%20Zeratsky%2C%20R.D.,risk%20of%20food%20poisoning%20increases.

[2] https://www.statefoodsafety.com/Resources/Resources/when-to-throw-it-out-leftovers

Guía para Conservar Dulces o Postres Caseros

Conservar Dulces Caseros
Conservar Dulces Caseros

Los dulces caseros en definición son todos aquellos dulces que se pueden preparar en casa, y que por lo general, son tradicionales y pasan de generación en generación, pero, ¿Cómo se conservan los dulces caseros?

Existe una amplia variedad de dulces caseros, algunos se conservan unos días a temperatura ambiente, otros pueden durar un año entero en las mismas condiciones. También algunos se pueden refrigerar o congelar, por eso, debes remitirte a las guías de conservación especificas para cada producto.

Si quieres aprender a conservar dulces caseros, te invito a que continúes leyendo.

¿Cómo conservar dulces caseros?

Pues bien, los dulces caseros abarcan una amplia variedad de platillos, acá se ha recopilado una gran lista de temas que encajan dentro de esta categoría.

Se ha dividido los dulces caseros en cuatro apartados: los que se conservan mejor a temperatura ambiente, los dulces que necesitan de refrigeración, aquellos que se congelan bien, y por último los que duran bastante en cualquier condición.

Debes pulsar sobre el enlace para ir a las guías especificas sobre como conservar el dulce casero correspondiente

Conservar dulces caseros a temperatura ambiente

Hay dulces que no requieren refrigeración alguna para conservarse en perfecto estado, de hecho, a muchos les resulta más conveniente estar a temperatura ambiente para mantener su calidad.

Algunos de estos postres son:

No obstante, hay unos pocos que resulta mejor mantenerlos calientes, como:

Estos dulces caseros suelen guardarse a temperatura ambiente siguiendo una serie de pasos similares, como por ejemplo:

  • Paso 1: Esperar a que el dulce se enfríe antes de guardar.

La mayoría de los dulces caseros se cocinan u hornean, por lo que ante de proceder a guardarlos se debe esperar a que estén completamente fríos. De este modo, el vapor no creara humedad por dentro que podría dañarlo.

Evidentemente, esto no aplica para los dulces que necesitan mantenerse calientes.

  • Paso 2: Poner el dulce casero en una bolsa o recipiente hermético.

Para protegerlo del polvo y aire. Algunos también necesitan envolverse en papel film o aluminio para dar un extra en protección.

  • Paso 3: Guardar en un lugar oscuro y seco.

Generalmente, se requiere que el sitio de almacenaje evite que el dulce casero quede expuesto a la luz o a una fuente de calor. Tampoco debe estar húmedo, ya que la humedad genera moho.

Esto tampoco aplica para los dulces caseros que necesitan de calor constante para conservarse mejor, como los churros y buñuelos.

Dependiendo de la receta, el dulce casero puede estar a temperatura ambiente unos días, semanas y unos pocos hasta llegan al año.

Conservar dulces caseros en la nevera

La mayoría de los dulces caseros necesitan mantenerse en frío, por lo que la nevera representa la opción ideal de almacenamiento. En especial, para:

Tal y como sucede con los dulces caseros que se almacenan a temperatura ambiente, los dulces caseros que se guardan en la nevera siguen una serie de pasos similares, como:

  • Paso 1: Esperar que el dulce se enfríe.

En caso de haber pasado por alguna clase de cocción, siempre es aconsejable esperar a que el dulce se enfríe antes de guardarlo en frío, así el choque de temperatura no dañará el dulce.

  • Paso 2: Envolver.

Muchos dulces suelen absorber el olor de otros alimentos que se encuentran cerca, para evitarlo precisan de ser envueltos con envoplast, papel aluminio o papel encerado. Además, de que también mantiene a raya la humedad.

  • Paso 3: Meter en un recipiente o bolsa hermética.

Para añadir un extra de protección se coloca el dulce casero dentro de un recipiente o bolsa hermética.

Mayormente se emplea un recipiente con tapa o hermético para evitar que algo caiga y arruine el dulce o que el ambiente de la nevera lo afecte.

  • Paso 4: Se almacena el dulce en la parte más fría de la nevera.

La zona más fría de la heladera es al fondo de la misma, alejada de la puerta, ahí la temperatura es más baja y estable.

La duración dependerá mucho del tipo de dulce casero que se haya preparado, pero también oscila entre días, semanas y meses, algunos pocos llegan a conservarse un año o más.

Congelar dulces caseros

Este método por lo general se emplea cuando se necesita guardar el dulce casero por una larga temporada, algunos se congelan bien, a otros cambian un poco su consistencia.

Pero unos pocos si resulta conveniente congelarlos, antes de dejarlos a temperatura ambiente o en la nevera, por ejemplo:

Los pasos generales para congelar los dulces caseros suelen ser los siguientes:

  • Paso 1: Enfriar.

En caso de que se haya cocinado de alguna manera, se debe esperar que el dulce se enfríe para así evitar que el choque de temperatura acabe afectándolo negativamente.

  • Paso 2: Envolver.

Con plástico para envolver o papel aluminio, en ocasiones se emplean ambos para así evitar las quemaduras por congelamiento.

  • Paso 3: Meter en un recipiente o bolsa hermética.

Estos deben ser aptos para congelar.

  • Paso 4: Etiquetar.

Acá como el tiempo de almacenamiento suele ser extenso, se debe colocar la fecha del día que se realizó el dulce para saber con exactitud el tiempo que lleva guardado.

  • Paso 5: Guardar en el freezer.

El periodo de almacenamiento suelo ser de meses, e incluso años. Pero siempre se recomienda consumir antes de cierto tiempo para evitar que el producto tenga un sabor a congelado.

Dulces caseros que se conservan bien en cualquier lugar

Estos dulces como cuentan con un alto grado de azúcar, que funciona como un conservante espectacular, hace que dure mucho tiempo sin importar el medio en el que se almacene.

Algunos de estos dulces caseros son:

Estos dulces caseros suelen pasar por un proceso de esterilización y luego se les realiza un vaciado (con excepción del pan de pascua), para garantizar su calidad por un buen tiempo sin que llegue a estropearse, inclusive muchos mejoran su sabor después de unos meses almacenado.

El periodo de conservación evidentemente se alarga si el lugar de almacenaje es frío, ya que el frío ralentiza el proceso de descomposición de los alimentos, esto es debido a que la actividad de las bacterias se reduce en un entorno frío.

Así que mientras más frío haga, es probable que el dulce casero dure mucho más. Claramente, esto se logra si el dulce casero se mantiene sellado.

¿Cómo saber si el dulce casero se encuentra en mal estado?

Por lo general, la mayoría de alimentos presentan señales similares cuando están en mal estado, por ejemplo:

  • Moho: si hay presencia de moho en el dulce o en el recipiente donde se guardó, lo mejor es desecharlo, porque ya ha entrado en contacto con bacterias nocivas para la salud.
  • Mal olor: si el dulce casero tiene mal olor, es evidente que se descompuso.
  • Mal sabor: este es la señal definitiva de que el dulce casero se echó a perder en caso de tener dudas al respecto. Si tiene mal sabor, como agrio, entonces producto debe ser desechado para evitar una intoxicación.
  • Endurecimiento: esto ocurre en algunos dulces cuando se deja demasiado tiempo en un entorno que los reseca, así que su consistencia cambia, se vuelven duros a tal punto que dejan de ser comestibles, pierden sabor e incluso se vuelven sumamente frágiles, ya que cuando se tocan se deshacen con facilidad.
  • Blandura extrema: esto pasa cuando el dulce absorbe mucha humedad, dejándolo extremadamente blando, y con una consistencia nada agradable.

¿Cuánto duran los dulces caseros?

Esto depende del tipo de dulce que se haya preparado, algunos tienen una corta duración como la gelatina o el mousse. En cambio el tiempo de vida útil varía dependiendo del lugar donde se almacene.

La mayoría de los dulces guardados en la alacena, a temperatura ambiente, no suelen durar mucho tiempo, con excepción de algunos, pero que para mantener la calidad del producto resulta mejor tenerlo de esta manera.

Los dulces que se almacenan en la nevera tienen una duración variable, algunos duran un par de días, otros mucho más tiempo. Pero en el congelador, los dulces suelen durar mucho más tiempo, de al menos un mes.

¿Cuál es la mejor forma de conservar los dulces caseros?

La mejor forma de almacenar los dulces caseros dependerá del tipo que se haya preparado. Algunos precisan mantenerse a temperatura ambiente porque conservan mejor su textura y consistencia aunque no duren mucho tiempo.

En cambio, otros por sus características conviene guardarlos directamente en la nevera, en especial si se vive en un lugar caliente o si es verano, porque la mayoría de dulces al quedar expuestos al calor se acelera su descomposición.

Congelar resulta una opción para almacenar por extensos periodos de tiempo, sobre todo si se preparó una enorme cantidad.

Si te guste este tipo de contenido, este sitio cuenta con una larga lista de temas relacionados con la conservación de alimentos, que te podrían interesar.